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Revelan últimos escritos del misionero abatido en isla de India: "¡No quiero morir!"

John Allen Chau llevaba un registro de sus aventuras y de su deseo por "proclamar a Jesús" a los habitantes del lugar. La tribu desciende de las primeras poblaciones humanas que salieron de África, asegura una ONG.

22 de Noviembre de 2018 | 17:14 | AFP
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"Estoy impaciente para verlos adorar a Dios en su propio lenguaje", escribió el misionero.

Captura de Instagram
PORT BLAIR, INDIA.- El misionero estadounidense, aparentemente asesinado por una tribu que vive aislada en una isla india, quería introducir el cristianismo en esta comunidad, conocida por ser hostil al mundo moderno, según revelan sus últimos escritos, difundidos el jueves por medios locales.

"Mi nombre es John. ¡Los quiero y Jesús los ama (...) Aquí tienen un poco de pescado!", clamó John Allen Chau a dos autóctonos armados cuando se acercó por primera vez a la isla Sentinel del Norte, del archipiélago indio de Andamán y Nicobar, según informaron medios locales.

El 16 de noviembre, este ciudadano estadounidense de 27 años murió al intentar entrar en contacto con esta tribu de cazadores y recolectores, de unas 150 personas, que vive en forma autónoma desde hace siglos en esta pequeña isla.

En estas últimas décadas, cualquier intento de contacto del mundo exterior ha terminado en hostilidades y en un rechazo violento por parte de esta comunidad.

El diario íntimo que John Allen Chau mantuvo hasta los últimos días y horas antes de su muerte, muestra a un joven viajero que se veía como un misionero cristiano.

"Ustedes quizás piensen que estoy loco por hacer todo esto, pero yo creo que vale la pena proclamar a Jesús a esta gente", escribió a su familia, en una última carta escrita en la mañana de su muerte.

"No es en vano -las vidas eternas de esta tribu están al alcance de la mano y estoy impaciente para verlos adorar a Dios en su propio lenguaje", dijo en referencia a los versículos de la Apocalipsis (7, 9-10).

Poco después de haber escrito estas líneas, Chau llegó a la playa de la isla y nunca más regresó. Los pescadores que lo transportaron ilegalmente hasta la isla se quedaron frente a la costa. Y desde allí pudieron ver como cayeron sobre él una multitud de flechas. Los autóctonos le pasaron luego una cuerda por el cuello y arrastraron su cuerpo.

El diario de este aventurero, cuya cuenta en Instagram está repleta de imágenes de sus viajes, revela que estuvo preparando este proyecto desde hacía tiempo, en secreto y "en nombre de Dios".

La víspera de su muerte, se acercó en dos ocasiones a los sentineleses, según este texto, imposible de verificar. "¡NO QUIERO MORIR!", escribió en mayúsculas. "Podría volver a Estados Unidos porque me parece que quedarse aquí significa una muerte segura", escribió, según ha trascendido.

"Regreso (a la isla). Rezaré para que todo vaya bien", rezan sus últimas líneas, a las 6.20 de la mañana, el 16 de noviembre.

El grave conflicto al querer recuperar el cuerpo

Ante la falta de pruebas físicas de la muerte de su hijo, su madre declaró al diario The Washington Post que creía que estaba vivo.
Este caso pone en un aprieto a las autoridades india, quienes deben recuperar el cuerpo del joven sin que eso suponga un choque de civilizaciones con la tribu de la isla.

Si acceden extranjeros para extraer los restos de Chau, romperán el aislamiento voluntario de esta tribu, con todas las consecuencias antropológicas y sanitarias que esto conlleva: al vivir aislados del mundo, esta comunidad no tiene un sistema inmunitario adaptado contra las posibles infecciones presentes en los organismos de los intrusos.

Los responsables locales enviaron un helicóptero y un barco para intentar determinar de lejos el lugar donde se encuentra el cadáver del estadounidense. "Hemos mantenido una distancia con la isla y todavía no hemos podido localizar el cuerpo. Esto puede necesitar días y misiones de reconocimiento", declaró Dependra Pathak, el jefe de la policía regional.

Las autoridades recurrieron a antropólogos indios y a especialistas en tribus para decidir cómo proceder.

Por otro lado, la policía abrió una investigación por homicidio y detuvo a los pescadores que ayudaron a Chau a llegar hasta la isla, ya que la ley india prohíbe acercarse a menos de cinco kilómetros, así como fotografiar o filmar a esta comunidad.

Según la ONG Survival International, esta tribu desciende de las primeras poblaciones humanas que salieron de África y vive en Andamán desde hace 60.000 años.
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