Reuters (imagen referencial)
El pasado 8 de junio, medios sudafricanos dieron a conocer la noticia de
una mujer que había dado a luz a 10 niños en un parto por cesárea, en un hospital de Pretoria. La información fue replicada en todo el mundo, ya que
Gosiame Thamara Sithole, de 37 años, superaba así a Halima Cisse, una mujer de Mali que en mayo dio a luz a nueve pequeños en Marruecos. Sin embargo, a diferencia de este último caso,
el nacimiento de los 10 pequeños no fue confirmado ni por el hospital donde supuestamente había ocurrido el parto, así como tampoco por las autoridades sudafricanas.
Y,
con el paso de los días, incluso el marido de Gosiame, Teboho Tsotetsi, ya no cree que los 10 niños existan, debido a que no acompañó a su mujer en el parto y tampoco ha podido ver a sus supuestos hijos.
Como si eso fuera poco, el 17 de junio pasado,
la mujer fue detenida en la casa de un familiar y luego
entregada a trabajadores sociales que la ingresaron al Hospital Tembisa para que se le evaluara su salud mental. Sin embargo
, su abogada ha asegurado que Sithole está retenida en el lugar en contra de su voluntad,
y que durante su internación ha sufrido hambre "tortura mental" y malos tratos.
¿Y los supuestos niños?
La mujer sigue afirmando que el parto múltiple fue real, y que sus hijos están en un paradero secreto y seguro.
"Para mí fue una historia de celebración"
Por otro lado,
Piet Rampedi, el periodista del Pretoria News que fue el primer medio en publicar la noticia, ofreció disculpas a sus colegas por los efectos que ha tenido la historia.
"
Lamento el daño a la reputación que las secuelas de la historia han causado al grupo, la empresa y mis colegas en general (...) La historia brindó a los detractores la oportunidad de lazar difamaciones sobre la integridad profesional no solo de mí, sino también de mis colegas del grupo. Por eso,
lo siento mucho. Fue lamentable", escribió en un correo electrónico.
Al momento de dar a conocer la noticia el nacimientos de los 10 niños, Rampedi aseguró que estuvo en contacto con Sithole y su marido durante el embarazo, pero que reveló la noticia solo después del nacimiento debido a "razones culturales y religiosas".
Al respecto, el periodista y editor de Pretoria News sostuvo en su carta de disculpas que
"definitivamente" podría haber manejado la historia mucho mejor, "especialmente el proceso de verificación", agregando que
conocía a Sithole y su marido, y no tenía motivos para dudar de ellos.
"
Para mí fue una historia de celebración. Por lo tanto,
nunca exigí una prueba documental del embarazo, como escáneres y tarjetas de la clínica (...) Sin embargo, a juzgar por el repentino giro de los acontecimientos y la reacción del gobierno y de nuestros detractores, estaba equivocado", concluyó.