SAN CRISTOBAL.- Para colmo llovió y la posibilidad de una cancha pesada asoma como inminente en el futuro de la selección chilena, la que nuevamente vio alterados sus planes y no podrá reconocer el pasto del estadio "Pueblo Nuevo", donde esta tarde se medirá ante Venezuela.
Hablar de lo trascendental del partido a estas alturas suena a historia demasiado conocida. Sin embargo, tener que recurrir a ese calificativo habla muy mal del presente chileno si es que quiere llegar al Mundial en dos años más.
Tomando en cuenta los datos estadísticos, se supone que el cuarto equipo en lograr el cupo directo a la cita del 2002 debería completar 27 puntos al cabo de las 18 fechas.
Entre hoy y mañana se completará la fecha seis, el primer tercio del largo torneo y, si se sigue considerando a las matemáticas, el cuarto lugar debería sumar ya 9 puntos. Chile tiene 4 y en el mejor de los casos haría 7, por lo que siguen penando los dos puntos perdidos como local ante Perú.
Nada tan grave, podría pensar Acosta si se aferra a los números. Pero el riesgo es grande por varios motivos:
-Ya se habrá jugado como visita con Bolivia y Venezuela, con los que teóricamente Chile debió rescatar esos puntos perdidos con los peruanos.
-Porque todavía se tienen que jugar los dos partidos con Brasil, donde no se puede soñar desmedidamente.
-Porque si se toman en cuenta los resultados de las clasificatorias pasadas (considerando los resultados con Brasil en los juegos de 1989), Chile terminaría el torneo con... 22 puntos, a cinco de la meta teórica.
-Porque las opciones pasan por no perder puntos de local y rescatar un triunfo afuera. La opción más realista asoma en Ecuador.
-Porque en las clasificatorias pasadas, tomando en cuenta los rivales con los que ya ha jugado Chile en las actuales, la "Roja" había empatado en Argentina, le había ganado a Perú en Santiago y había empatado con Bolivia en La Paz.
Para esta tarde, la formación nacional sería con Nelsón Tapia en el arco, Ronald Fuentes como líbero, Javier Margas y Ricardo Rojas como stoppers, Francisco Rojas como volante de salida por la derecha, Claudio Maldonado como volante de contención, Rodrigo Tello en la salida por la izquierda, Fabián Estay y José Luis Sierra para la salida, Sebastián Rozental e Iván Zamorano en el ataque.
