RIO DE JANEIRO.- La selección brasileña de fútbol se concentró hoy en un clima de optimismo en la Graja Comary de Teresópolis, en el estado de Río de Janeiro, con miras al partido contra Chile el martes, por la sexta fecha de las eliminatorias sudamericanas al Mundial del 2002.
El mediocampista Rivaldo, de Barcelona de España, se presentó en la concentración mostrando tranquilidad: ''Basta que repitamos la actuación contra Argentina para conseguir un buen resultado frente a Chile. La presión es grande pero Brasil es Brasil''.
El grueso del plantel llegó en la tarde de hoy a Teresópolis y se puso a las órdenes del técnico Wanderley Luxemburgo, que cumple hoy dos años al frente del seleccionado.
Los brasileños solamente realizarán un entrenamiento, el domingo, antes de viajar a Chile.
El equipo sufrió bajas importantes como la del zaguero de Milan Roque Junior, quien presenta contractura muscular en el muslo izquierdo.
A la baja del defensa brasileño se suman las del volante César Sampaio, también lesionado, y del atacante Ronaldinho Gaúcho, quien brilló hoy en el amistoso contra la selección olímpica de Chile.
La delegación partirá a Santiago el lunes por la mañana para enfrentar el martes al seleccionado chileno.
Tres jugadores -Fabio Bílica, Marcos Paulo y Alex, quienes jugaron un amistoso con la selección brasileña SUB-23 frente a Chile el miércoles- se sumarán a la concentración sólo el domingo.
