UDINE.- Jorginho, el jugador brasileño del Udinese que fue expulsado en la víspera de Italia, presentaba para acreditarse como "comunitario" un pasaporte portugués que no sólo era falso sino que, incluso, había sido robado.
Es el cuarto caso de un futbolista del club italiano, después de los brasileños Warley y Alberto y del paraguayo Alberto Da Silva, descubierto con documentación irregular, por lo que las autoridades judiciales han decidido ampliar sus investigaciones, en la presunción de que podría haber más jugadores que obtuvieron sus pasaportes por vías ilegales.
De los cuatro casos, el de Jorginho (ex Palmeiras y PSV Eindhoven) es el más grave, porque la Fiscalía de Udine sospecha de la existencia de una organización internacional que primero roba pasaportes y después los falsifica, para venderlos por sumas de dinero que oscilan entre los 15.000 y los 30.000 dólares.