SANTIAGO.- La magia está de vuelta. Y ya no se trata sólo de Michael Jordan y los Bulls, como hace algunos años, sino que de la NBA, la competitiva Asociación Nacional de Básquetbol de Estados Unidos.
Los Angeles Lakers, campeones de la temporada pasada, intentarán revalidar su título pero no la tendrán fácil. El equipo de O'Neal, Bryant y compañía son el equipo a batir. El resto de las escuadras, conscientes del paseo militar que se dio el equipo angelino, se han reforzado. Algunos mucho y bien como los Portland TrailBlazers, Orlando Magic, San Antonio Spurs y los New York Knicks.
Los Lakers no han renovado al alero Glenn Rice, el tercer pilar del equipo en discordia la pasada temporada que no fue explotado como debía y se ha marchado a los Knicks, pero se han hecho con los servicios del incombustible Horace Grant. El pivot de 35 años, ex compañero de Jordan en los laureados Chicago Bulls y que luego pasó a jugar a los Magic, aportará experiencia bajo los tableros de los Lakers. El otro gran fichaje ha sido el polémico e irregular pero determinante Isaiah Rider.
Los principales problemas de los Lakers por revalidar el título vendrán precisamnete desde su conferencia. En el oeste, Orlando, Portland y San Antonio suenan como alternativas. Los Magic quieren volver a recuperar el prestigio que perdieron con las marchas de O'Neal y Penny Hardaway en su momento. Desde entonces no han hecho nada. Conscientes de ello han tirado este verano la casa por la ventana y han fichado al buque insignia de los Detroit Pistons, Grant Hill, y al 'número 2' de los Toronto Raptors, Tracy McGrady. Los de Orlando intentaron un tercer fichaje que hubiera les habría convertido en imparables: el pivot de los Spurs, Tim Duncan.
Precisamente Duncan ha sido el mejor 'fichaje' del equipo de San Antonio que volverá a lucir a su flamante pareja de 'Torres Gemelas' formada por el arrollador duo Duncan-David Robinson. El equipo del almirante se ha hecho con los servicios de Derek Anderson. Además contará con Sean Elliot y Steve Kerr.
Los Blazers tampoco han escatimado en gastos y todo apunta a que hará algo muy grande esta temporada. Los de Portland siguen con su bloque base que tantos éxitos les dio la pasada campaña: Damon Stoudamire y Steve Smith como directores de orquesta; Scottie Pippen como alero y máquina de anotar puntos; y en el poste, el eternamente joven Arvydas Sabonis que cada año que pasa, mejora igual que el vino, y Rasheed Wallace. La gran baja para los de Oregon será la marcha de Brian Grant que ahora juega en Miami. Para suplir su ausencia han fichado a Shawn Kemp. Simplemente espectacular la plantilla de los Blazers. Su único handicap es su entrenador Mike Dunleavy.
En el este hay un gran candidato para eregirse campeón de conferencia y luchar por el anillo: los New York Knicks que este año se han desecho precisamente de su jugador más emblemático, el pivot jamaicano Pat Ewing, que se ha marchado a los Seattle SuperSonics. Este cambio supuso un revuelo veraniego ya que doce jugadores de distintos cuadros se vieron envueltos en el traspaso. Algo de locos. El gran fichaje del equipo neoyorquino es el del mencionado Glenn Rice que cansado de no ser valorado justamente por Phil Jackson en Los Angeles ha cambiado de aires. El resto de la plantilla está compuesta por jugadores de otra galaxia: Marcus Camby, Allan Houston, Larry Johnson y Latrell Sprewell, entre otros.
Los Heat sonaban como los auténticos candidatos al título pero la inesperada baja por problemas en el riñoón de su pivot estrella Alonzo Mourning les ha restado puntos.
Todo apunta a que el gran ausente por la lucha del título este año serán los Pacers. El mítico Larry Bird dejó el banquilló de Indiana y su puesto lo ha ocupado Isaiah Thomas. El pivot holandés Rick Smits ha abandonado la franquicia de los Pacers y se ha retirado. Ahora busca una liga menos exigente que le permita estar en forma para jugar con la selección de su país. El veterano alero Chris Mullin también dejará de vestir la camiseta de los Pacers ya que ha vuelto a su 'casa', los Golden State Warriors, donde se consolidó como un jugador con una muñeca letal capaz de encestar desde cualquier posición. Para paliar tantas bajas importantes, los de Indianapolis han fichado a Jermaine O'Neal que formará junto a Reggie Miller y Jalen Rose un trio mortífero. Eso es lo que esperan.
