SANTIAGO/LIMA.- La UC tenía que ganar para seguir soñando en la Copa Libertadores, y no lo hizo. Es más, terminó cuajando una de sus peores presentaciones y cayó 3-1 ante Sporting de Cristal.

La delantera cruzada nada pudo hacer ante la superioridad de sus rivales.
La UC tenía que jugársela para buscar el triunfo, pero no lo hizo. Una defensa llena de equivocaciones, un mediocampo lento, sin ideas y dos solitarios delanteros (en la segunda etapa fueron tres con el ingreso de Pérez por Verdugo, que se unió a Gioino y Rubio) no sirvieron para siquiera enhebrar una jugada de fútbol o, en el mejor de los casos, llevar peligro a la valla del correcto Delgado.
La UC no tenía nada que perder y sí mucho que ganar, y por eso debía arriesgar, pero no lo hizo. Un planteamiento timorato, fácil de maneatar por los aplicados peruanos, terminó entregándole el partido a los locales.
Para no perder, la UC debía marcar especialmente y con mucha rigurosidad a Flavio Maestri, mas no lo hizo. El ex delantero de la "U", que había convertido en San Carlos de Apoquindo, le ganó el duelo a Lenci y Ramírez y se dio el lujo de celebrar en dos oportunidades. El otro tanto fue de Julinho.
Meneses tenía que jugársela con los cambios en la segunda fracción, y al final fue lo único que hizo la UC. Ingresó Pérez por Verdugo, pero el calvo delantero no dio con la pelota ni con sus carrerones y terminó ofuscado, cometiendo muchas infracciones y peleando con el árbitro.
En fin, la UC no hizo nada por ganar cuando debía hacerlo imperiosamente para seguir con vida en la Libertadores (el descuento fue obra de un irreconocible Ormazábal). Y así no más cosechó su eliminación, aunque era algo que ya había sembrado en Santiago y en sus salidas a Brasil y Paraguay. Sporting Cristal sólo le dio el adiós definitivo.