NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- Tiene el número de Michael Jordan en su espalda y el teléfono del ex rey del baloncesto en su agenda.
El miércoles, millones de estadounidenses estarán pegados a sus televisores para ver si este jugador de 18 años, con una cuenta bancaria de millones de dólares, puede convertirse en el mayor fenómeno del baloncesto desde la aparición de Jordan.
La hora llegó para LeBron James, el prodigioso talento que pasó de jugar baloncesto en la secundaria seis meses atrás a darse la gran vida y ganarse el sobrenombre de "Rey James".
Elegido por los Cavaliers de Cleveland como la opción número uno del draft, James y su camiseta número 23 harán su debut cuando los Cavs enfrenten a los Kings de Sacramento en la apertura de la temporada de la NBA.
Ese día quedará marcado como el inicio de una carrera pero también como el final de un alocado preámbulo que se fue hilvanando desde que James comenzó a atraer cámaras de televisión, periodistas, representantes y buscadores de talento en la escuela St. Vincent - St. Mary en Akron el año pasado.
Fue una jornada surrealista. El sitio oficial de los Cavaliers en la Internet capturó su naturaleza perfectamente. "Cada viaje de los Cavaliers a Cleveland es diferente", explicó.
"Esta es la ruta rápida de LeBron James: Jugar en la secundaria y apuntar al norte en el Hummer por la autopista interestatal I-77", agregó.
El auto Hummer, el vehículo de moda entre los famosos y el regalo de su madre cuando cumplió los 18 años, es uno de los tantos beneficios que logró James en un año que fue como un torbellino para él.
Otros son el contrato por cuatro años y 16,8 millones de dólares con Cleveland y el acuerdo por 90 millones de dólares de publicidad con Nike que hizo que los veteranos observadores movieran sus cabezas en señal de asombro.
Hasta los Cavaliers quedaron abrumados. "Es casi como tener a una estrella de rock", dijo el presidente y gerente general del equipo, Jim Paxson, en la Internet.
UN MUNDO POLARIZADO
James también tuvo que madurar. "Pasé por esto en los últimos dos años, puedo manejarlo", dijo.
Pero su elección de saltar la universidad por tomar la "Ruta Rápida" para llegar a la fama y la fortuna lo catapultaron a un mundo polarizado donde el éxito lo llenará y el fracaso casi seguro lo quebrará.
Un artículo de la revista Sports Illustrated en Estados Unidos plantea la ecuación.
En una nota titulada "La importancia de ser LeBron", la publicación dice que las actuaciones de James tendrán consecuencias para "una ciudad, una franquicia, un entrenador, un gerente general, una liga, varias corporaciones y una gran familia".
Cleveland, que no es conocida por su excelencia en materia deportiva, suplica por un ganador. Lo mismo necesitan los Cavaliers, cuyo balance de 17 victorias y 65 derrotas en la temporada regular el año pasado ayudó a que pudieran elegir a James en el primer lugar del draft.
El experimentado entrenador Paul Silas fue elegido por los Cavaliers por ser alguien que podría ayudar a que James tenga éxito esta temporada. Los Cavs esperan que James transforme al equipo en unos pocos meses y lo lleve a los playoffs.
La propia NBA depende de James para generar una exposición positiva. Luego de un verano de descontento, plagado de tapas de diarios sobre el caso que el jugador de Los Angeles Lakers Kobe Bryant afronta por una denuncia de violación, James es visto como una posibilidad de nuevo vigor para el deporte.
LA PROXIMA GENERACION
Además, James, salido un un vecindario pobre y rudo, personifica el "sueño americano". "El muchacho es lo que América espera", dijo Aaron Goodwin, representante de James, a Sports Illustrated.
"LeBron no es (el golfista) Tiger (Woods), ni Michael (Jordan). Él es la próxima generación", agregó. La charla sobre las generaciones es acertada. Hasta el director de cine Spike Lee jugó de manera maliciosa con la juventud de James en un comercial de televisión sobre la vuelta de la NBA.
En ella se ve a James acostado en una cuna rodeado de niños. La falta de temores por su juventud es lo que probablemente lo mantiene alejado del mundo real por el momento. Pero sólo un optimismo eterno podría sugerir que James no sufrirá una reacción en contra en algún momento de su carrera.
Pero ya se han generado problemas. el ex jugador Charles Barkley, quien trabaja como analista para la cadena de televisión TNT, dijo que: "Él no puede tirar. En este momento no está preparado y la NBA está perjudicando a este chico al convertirlo en un personaje tan popular con tanta rapidez".
Más allá que es un atleta de 2,03 metros y 108 kilos de peso con un envidiable sentido de juego, su salto aún no está totalmente pulido y Silas tiene que decidir en qué posición jugará.
Un vistazo a su ficha de jugador en la NBA lo dice todo. Está en blanco. Aún tiene todo por hacer. Mientras James es perseguido por la prensa, juzgado por los gurúes de las relaciones públicas, solicitado para que sea presentador en entregas de premios, dirigido por un séquito de consejeros y amado por su madre, hay una persona que puede probar que es muy útil aún después del debut del miércoles.
Su nombre es Charlie Maher, el psicólogo de los Cavaliers.
