LONDRES.- Cuando los mejores tenistas de la temporada se enfrenten desde el sábado en la Copa de Maestros, en Houston, algunos intentarán ganar algo más que un trofeo brillante, ya que el nombre de quien se quedará como el número uno del ránking mundial al final del año también estará en juego.
La "crema" del tenis masculino estará en Texas, con los ocho jugadores mejor clasificados en la "Carrera de Campeones" de la ATP luchando por quedarse con el torneo que repartirá 3,7 millones de dólares en premios.
Pero sólo el estadounidense Andy Roddick, el español Juan Carlos Ferrero y en menor medida el suizo Roger Federer pueden quedarse con el premio máximo, el número uno del ránking al finalizar la temporada.
Cinco jugadores ocuparon el puesto de privilegio durante el año, pero es Roddick quien tendrá el honor de aparecer como número uno en el torneo que se jugará en el West Side Tennis Club de Houston, luego de llegar a ese lugar esta semana tras su actuación en el torneo París-Bercy.
La escalada hasta la cima de Roddick se dio en 10 meses que fueron vertiginosos. El estadounidense comenzó la temporada en el décimo puesto y con muchos analistas preguntándose si podría llegar a convertirse en algún momento en lo que prometía desde su explosiva aparición en el circuito en el 2000.
Roddick contestó esas preguntas con seis títulos, incluido el del Abierto de Estados Unidos -su primera conquista en un torneo del Grand Slam-. Ahora, el joven estadounidense tiene la posibilidad de confirmar su prestigio con una victoria en su primera Copa de Maestros.
"(La Copa de Maestros) fue una de mis metas al inicio del año, porque indica que uno fue consistente durante toda la temporada", dijo Roddick luego de ganar su primer título en torneos del Grand Slam en Nueva York.
Texas es un lugar que le trae buenos recuerdos a Roddick ya que allí el tenista de 21 años ganó el que fuera su segundo título en el circuito la temporada pasada y llegó a la final de ese torneo en 2003.
"Ya he ganado en Houston y espero volver a jugar ahí", recordó el título que ganó previamente en esa ciudad.
Una temporada agotadora
Luego de una temporada agotadora, el aliento de sus compatriotas puede darle a Roddick una energía extra para poder vencer a algunos rivales que también llegan cansados.
Roddick comenzará el torneo con 867 puntos en la "Carrera", mientras que Ferrero lo escolta con 841.
El español buscará superarlo aunque para ello deberá hilvanar una cadena de victorias. Por cada partido ganado en la ronda inicial los tenistas sumarán 20 puntos, 40 más por superar las semifinales y quien se quede con el torneo sumará otras 50 unidades.
Ferrero, ganador de Roland Garros en el 2003, sabe el esfuerzo que requerirá esa tarea, ya que el año pasado llegó a la final de la Copa de Maestros que se jugó en Shanghai, pero cayó en esa instancia ante el australiano Lleyton Hewitt.
Al final de otra larga temporada, el español dice que casi no tiene energía. "Estoy cansado y tengo que viajar mucho antes que termine el año", dijo en París la semana pasada. "Gané un torneo del Grand Slam y obtuve buenos resultados este año. Hice bien las cosas en la Copa de Maestros de Sydney y Shanghai y espero volver a hacer lo mismo en Houston", remarcó.
Federer también tuvo un buen año, pero el campeón de Wimbledon, que aparece a 142 puntos de Roddick en la "Carrera", necesitará más suerte que experiencia si quiere llevar el número uno a su país.
Más de la mitad de los ocho participantes tienen 23 años o menos -Roddick (con 21 años), Ferrero (23), Federer (22) y los argentinos Guillermo Coria (21) y David Nalbandian (21)-, lo que refleja el recambio en la camada de tenistas que lideran el circuito masculino.
El alemán Rainer Schüttler y el español Carlos Moyá, ambos de 27 años, y el veterano estadounidense Andre Agassi completan la lista de participantes del torneo.
Agassi, quien con 33 años es una década más viejo que la mayoría de sus competidores, podría llegar a Houston con el mayor obstáculo a su juego: la inactividad.
El campeón del Abierto de Australia volverá a la acción por primera vez desde el Abierto de Estados Unidos luego de tomarse un descanso tras el nacimiento de su hija.
Agassi integra el denominado grupo Azul junto a Ferrero, Federer y Nalbandian, mientras que el grupo Rojo lo conforman Roddick, Coria, Schüttler y Moyá.
