TALCAHUANO.- Por espacio de 90 minutos practicó la Selección Sub 23, sin aún mostrar indicios de la formación que enfrentará mañana su segundo compromiso ante Venezuela a las 20 horas.
El entrenador Juvenal Olmos delegó la dirección de la práctica a su ayudante Óscar Wirth, quien mantuvo una larga charla con los jugadores titulares del duelo de anoche ante Uruguay los que además llevaron a cabo un trabajo muscular regenerativo.
El Complejo Deportivo Petrox acogió además a un centenar de hinchas ávidos por un saludo o un autógrafo de quienes por ahora son los máximos referentes del deporte local. Sin embargo, el descontrol mostrado por algunos de estos jóvenes terminó por obligar al llamado de la seguridad para permitir el normal desarrollo de la práctica.
Las dudas
Mientras Olmos se mantenía en hotel, revisando el video del partido de anoche entre Venezuela y Brasil, en Petrox el médico de la Sub 23 Julio César Botello, confirmó la completa mejoría del zaguero Miguel Riffo, quien padeció de un esguince en su tobillo izquierdo: “En este momento depende del cuerpo técnico la decisión de hacerlo o no jugar. Él evolucionó bien y se siente bien lo que es un factor muy importante”.
Quienes manifestaron pequeñas lesiones fueron Luis Pedro Figueroa (dolor en la mano derecha), José Contreras (contusión en la rodilla derecha), Jorge Carrasco (leve hinchazón del tobillo derecho) y Johnny Herrera (lesión en el dedo índice de la mano derecha).
De esta forma recién en las próximas horas se resolverá el reemplazante del expulsado Luis Oyarzún quien debería ser Miguel Riffo. En este caso las dos opciones que maneja Olmos son mantener la línea de cuatro zagueros o cambiar a tres defensores para protegerse de las eventuales suspensiones de los amonestados José Contreras y Miguel Aceval.
Este último caso permitiría el ingreso de Braulio Leal para sumarse a las tareas de contención en el mediocampo.
La Selección regresó al hotel donde esperará concentrada y sin contactos con la prensa el duelo ante Venezuela.
