CONCEPCIÓN.- Los aplausos premiaron con justicia a Rodrigo Millar, Luis Pedro Figueroa y Mark González. Pero detrás de ellos hubo dos jugadores que se encargaban de hacer que se lucieran. Jorge Carrasco y Rubén Bascuñán.
Carrasco es de Audax y siempre fue defensor, pese a que recuerda algunas actuaciones como volante central en la Sub 17. Pero Juvenal Olmos lo comenzó a preparar en el puesto y su cansancio no fue en vano.
"Fíjate que después del partido llegué al hotel y me tiré en la cama. Estaba muerto. Me acosté como a la una y me desperté a las once. No me di ni cuenta, pero aparte del cansancio estaba la presión que sentí antes de debutar".
Y como rezo, detalla su labor ante Uruguay: "Tenía la misión de estar siempre bien centrado, para cuidar las espaldas de (Luis) Figueroa, (Rodrigo) Millar y Mark González. Juvenal Olmos me dijo que me quedara cerca de (Rubén) Olivera y con el cambio de ellos me tocó marcar a (Carlos) Grosnile. Creo que estuve bien".
¿Algún espejo? "Siempre voy a entregar mucha lucha. Uno se va fijando en hombres como Luis Chavarría o "Kalule" Meléndez".
Rubén Bascuñán es de Colo Colo y tuvo un paso por Osorno en 2003. Era del gusto de Gustavo Benítez, pero con la partida del paraguayo debió buscárselas por si mismo.
Ante Uruguay ingresó por Carrasco a veinte minutos del final, para asegurar la pelota. "Siempre trato de estar en las dos áreas. La función del "6" debe ser esa. Cuando no tenemos el balón, tratar de recuperar en el campo de ellos o sumarse a la defensa y cuando lo tenemos ir apoyando al ataque para tener opciones de rematar".
Y lo tuvo. Tras un carrerón de Jean Beausejour, recibió a la entrada del área. Ni se inmutó por la pierna amenazante de Pablo Melo. "Le quise pegar con tres dedos, pero me salió un poco recto. Lamentablemente me lo taparon, porque un gol hubiese sido espectacular".
Resulta de Carrasco y Bascuñán enfrentaron a Venezuela en Colombia. Y algo tienen que decir. "Yo creo que va a ser más complicado el partido contra Venezuela que Uruguay. Ellos nos van a esperar más, llegan en forma asociada con varios volantes. Tienen a (Miguel) Mea Vitali, que es un gran jugador y a un volante por la izquierda (Wiswell Isea) que nos complicó mucho en Colombia", advierte el primero.
"En el papel puede sonar que es sencillo. Pero nosotros conocemos a Venezuela porque jugamos allá en Colombia y nos pareció un buen equipo. No podemos confiarnos porque en la Eliminatoria ellos nos ganaron en Chile. Han ido creciendo y nosotros no podemos mirarlos en menos".