CONCEPCION.- Pese a que la espectacularidad del mediocampo chileno destacó particularmente a Luis Pedro Figueroa y Mark González, hay uno que sabe bien de trabajo silencioso.
Se trata de Rodrigo Millar, hombre distante de las frases grandilocuentes y las afirmaciones tajantes. El que ante Uruguay supo manejar los ritmos del partido y terminó aportando una regularidad desequilibrante, en especial por los vaivenes de quienes son profesionales a los 23 años.
-¿Cómo se sintió en la tarea que te entregó Juvenal Olmos?
"Tenía que acompañar a (Jorge) Carrasco en tareas de contención y también tratar de crear fútbol. Creo que le cumplí esa labor a Juvenal, pero me hace más feliz saber que el equipo anduvo bien, que no tuvo problemas en defensa y que eso nos llevó a un triunfo más que merecido".
-Lo curioso es que usted aparecía como uno de los hombres que marcarían goles en la Preolímpica, y resultaron siendo otros jugadores.
"Hubiese sido el broche de oro. Tuve oportunidades de anotar, pero estoy tranquilo y esperanzado en que se puedan concretar ante Venezuela".
-Además está el aliciente de la posibilidad de partir al extranjero en caso de que realice un buen Preolímpico...
"Ojalá. Siempre dije que esto era una vitrina enorme para todos nosotros y con buenas actuaciones uno puede quedar en la vista de los empresarios. Me gustaría que apareciera una oportunidad de partir".
-¿Teme usted caer en el complejo de las selecciones chilenas que parten bien y terminan mal los torneos?
"Hemos hablado mucho de ese tema. Lo hablamos en el entretiempo ante Uruguay, de que no teníamos que relajarnos pese a ir ganando 2-0. Ante Venezuela será lo mismo: hay que entrar mucho más aplicados y concentrados para llevarnos el triunfo. Creo que va a ser parecido, porque Venezuela agrupa mucha gente en el mediocampo y para una línea de cuatro zagueros. Nos va a costar, pero el triunfo ante Uruguay nos dejó con mucha confianza".
-En el plano físico, ¿sintió el esfuerzo ante Uruguay en el segundo tiempo?
"Igual fue para ir regulando, sabiendo que en 48 horas tendríamos otro partido. Quizás el resultado frente a Uruguay estaba un poco más controlado y nosotros tenemos que jugar día por medio.
