CONCEPCION.- Puede ser que alguna disputa aparezca de vez en cuando, pero la convivencia entre los jugadores de Santos y Cruzeiro en la selección brasileña de fútbol Sub 23 que participa del preolímpico de Chile es muy pacífica más allá de la rivalidad entre ambos equipos.
La mayoría de ellos pasa el tiempo jugando a las cartas, mientras que los estelares Diego y Robinho prefieren los videojuegos.
Los jugadores de Cruzeiro y Santos, históricos rivales y campeón y subcampeón del torneo Brasileño en el 2003, respectivamente, representan casi la mitad del equipo que participa del preolímpico que da dos cupos para los Juegos de Atenas que se disputarán este año.
Nueve (cinco de Santos y cuatro de Cruzeiro) de los 20 convocados por el director técnico Ricardo Gomes vienen de esos dos clubes.
Del equipo titular, Gomes, Maicon y Edú Dracena del Cruzeiro forman la base de la defensa, junto a Alex de Santos. En tanto, los santistas Paulo Almeida, Elano, Diego y Robinho dominan el mediocampo y el ataque de la selección.
Por la lesión de Elano en el partido con Paraguay, el entrenador decidió que su reemplazante sea Wendell, de Cruzeiro.
Ellos son rivales en sus clubes, pero forman parte del grupo que juega a las cartas en la concentración de Brasil en Concepción, junto a Paulo Almeida, Edú Dracena y Maicon, y los "extranjeros" Maxwell (del Ajax de Amsterdam, de Holanda) y Fabio Rochemback (del Sporting de Lisboa, de Portugal).
"La convivencia es buena", aseguró Paulo Almeida en declaraciones a Reuters.
"Estamos mucho tiempo juntos. La convivencia nos fortalece dentro del grupo. Somos un grupo en el que cada uno busca dar lo máximo", sostuvo, por su parte, Wendell.
BROMAS POR EL TITULO
Existen algunas provocaciones de los campeones de Cruzeiro para los jugadores de Santos por la disputa del Brasileirao.
"Les decimos que este año vamos a ganar de nuevo (el título)", agregó Wendell.
Los juegos de cartas también vienen bien para apaciguar los ánimos después que la calma de la concentración brasileña fuera interrumpida por una llamada telefónica del ex portero internacional Emerson Leao.
En una conversación con Alex, el actual director técnico del Santos le habría indicado al zaguero que debería cambiar de posición con Edú Dracena en la defensa.
Cuando se enteró de la llamada de Leao, el técnico Ricardo Gomes criticó la actitud del ex portero de la selección.
"Es algo que no debe repetirse. El, que defiende tanto la imagen (de los entrenadores), debe pensar más las cosas que hace", dijo Ricardo Gomes, quien nunca llegó a jugar con Leao.
"Alex jugó 10 partidos en esa posición en la selección (por el lado izquierdo) y siempre ha sido elogiado. Esto no es el Santos, es la selección brasileña", agregó Gomes, quien sostuvo que no tiene nada personal con Leao y que no desea que los futbolistas quedaran en medio de la polémica.
"Ese es un problema que a mi no me corresponde resolver. Son dos personas con las cuales tengo el placer de trabajar", dijo el habilidoso mediocampista Diego. "Esto no va interferir con nuestro trabajo dentro del campo de juego".
Justamente Diego y su compañero de ataque en el Santos, Robinho son algunos de los que prefieren los videojuegos a las cartas.
En tanto la Internet, la música y los paseos por el centro de Concepción son otros de los pasatiempos de los jugadores brasileños para distraerse entre los compromisos por el preolímpico y las llamadas de Leao.
