MELBOURNE.- El argentino David Nalbandian continúa imparable su firme andar por el Abierto de tenis de Australia, donde hoy logró su pase a la tercera ronda tras una contundente victoria frente al alemán Florian Mayer.
También estará en la siguiente ronda Guillermo Cañas, que hoy, en su victoria sobre su compatriota Agustín Calleri, recordó al aguerrido jugador de antes de su grave lesión. En el cuadro femenino, una cada vez más ambiciosa Paola Suárez se deshizo sin excesivas dificultades de la ucraniana Julia Vakulenko.
En un día soleado pero muy ventoso, Nalbandian se impuso por 6-1, 6-0 y 6-3 en su segundo partido del primer Grand Slam de la temporada, donde el año pasado alcanzó los cuartos de final.
"Siempre que gano quedo conforme -dijo un sonriente Nalbandian-. Ahora, si me preguntan si jugué bien, yo diría que sí, que no lo hice mal".
Pese a la contundencia del resultado, Nalbandian, que antes de empezar el torneo ya avisó venciendo a los estadounidense Andy Roddick y Andre Agassi en Kooyong, aseguró que aún le quedan aspectos técnicos por mejorar.
"Tengo que ajustar todavía algunos detalles a causa del cambio de la raqueta, tiene otro formato y me cuesta encontrar el centro", aseguró el argentino que cada vez cuenta más entre las apuestas para el triunfo.
El ex tenista sueco Mats Wilander lo señaló como su único candidato, mientras que el australiano Lleyton Hewitt, para quien Roddick, Agassi y el suizo Roger Federer son los grandes favoritos, advirtió que habría que tener mucho cuidado con el argentino, finalista de Wimbledon en 2002.
Después del brasileño Ricardo Mello y de Mayer, Nalbandian, octavo cabeza de serie, afrontará en la siguiente ronda su primera gran prueba en Melbourne, el sudafricano Wayne Ferreira.
"Fue semifinalista el año pasado y llegó a cuartos otra. Es muy peligroso, saca bien, tiene una derecha muy difícil y es un gran jugador. Fue "top ten" y eso es serio. Pero yo tambien soy bueno, che. Estoy jugando bien, ¿o no?", ironizó.
Cañas revive bajo el sol
Después de su terrible 2003, en el que pasó ocho meses alejado de las canchas por lesión, Cañas logró hoy una de sus mejores victorias tras su regreso a costa de su amigo Calleri, al que derrotó por 6-1, 4-6, 2-6, 7-6(2) y 6-4.
"Hoy tuve que sacar a relucir el Cañas de la última epoca, ese que luchaba y no se entregaba, pero me costó mucho más sacarlo que antes de la lesión", explicó Cañas. "Tengo que seguir viviendo partidos".
Su próxima oportunidad será dentro de 48 horas ante el británico Tim Henman, jugador que se encuentra en una gran forma y que será un difícil rival para el argentino. Sin embargo, a medida que avanza el torneo, la confianza se hace más fuerte dentro de la cabeza de Cañas, que consideró otro triunfo haber aguantado cinco sets sin molestias.
Menos apuros pasó hoy Suárez, que se deshizo de su rival por 6-3 y 6-4 y cada vez se asienta con más firmeza en sus ambiciones.
"Estoy trabajando para meterme en el "top ten" y no fue un mal comienzo del año, vamos a ver", advirtió la argentina, que antes de llegar a Melbourne se adjudicó su primer título de la temporada en Canberra.
Número uno del mundo en dobles junto a la española Virginia Ruano Pascual, Suárez, de 27 años, está dispuesta a aprovechar su gran momento de forma a toda costa, por lo que no duda en estos momentos en priorizar su carrera como singlista sobre cualquier otra cosa.
"Sí, porque número 1 en dobles ya fui dos años, "top ten" nunca", señaló la sudamericana, que se enfrentará en la siguiente ronda a la suiza Patty Schnyder.
