CARACAS.- La victoria del Unión Atlético Maracaibo en su visita al Fénix de Uruguay, concedió otro éxito para el ascendente fútbol de Venezuela, que ya dejó de ser la "Cenicienta" de Sudamérica en la tradicional Copa Libertadores.
Venezuela, que participa en el torneo desde 1964, nunca cosechó tantos éxitos con tres clubes en una sola edición y más aun como visitantes, en un año donde el fútbol local retornó en grande, tras seis años de una fase previa con los equipos mexicanos.
Este año, ya los clubes de Venezuela tienen tres victorias, de ellos dos a domicilio, una en Chile y otra en Uruguay, donde ganaron por primera vez en su historia, dejando una grata impresión en su fútbol.
La racha la comenzó hace más de una semana el Caracas FC, que se dio la tarea de superar a domicilio a la Universidad de Concepción, por 2-3, tras ir ganando por 0-3 hasta los 76 minutos.
Por su parte, el debutante Unión Atlético Maracaibo, con dos golazos del argentino Mariano Martínez y del venezolano Ruberth Morán, "torció" la historia este miércoles en canchas "charrúas" con un gran triunfo sobre Fénix 1-2.
En Uruguay, sólo Mineros de Guayana fue capaz de obtener un empate en 1990 ante Progreso 1-1 en 21 partidos, pero los marabinos fueron el primer "golpe victorioso" en territorio "celeste".
Maracaibo ya tuvo su primera señal cuando empató en su debut ante Vélez Sarsfield de Argentina 1-1, el primer empate de un venezolano en territorio argentino.
El propio Caracas FC sumó su segundo triunfo particular el martes sobre la propia Universidad de Concepción 1-0, que le abre las esperanzas de llegar a la clasificación.
Otro que aún no gana pero que tuvo contra "las cuerdas" a River Plate, fue Deportivo Táchira, que igualó en casa ante los "millonarios" sin goles, pero rescató a domicilio un valioso empate ante el Tolima de Colombia 1-1 con un golazo del argentino Emerson Panigutti, previo a su enfrentamiento la próxima semana en casa ante Libertad de Paraguay.
En treinta años, los equipos venezolanos pocas veces han llegado a las instancias más lejanas, casos concretos como Portuguesa en 1977, en su primera clasificación a una fase de semifinales, debutó con una goleada en Acarigua ante el brasileño Internacional 3-0, pero fue derrotado en los demás encuentros por el también brasileño Cruzeiro, a la postre, el campeón de esa edición.
En 1983, el desaparecido Atlético San Cristóbal, de la mano del técnico uruguayo Walter "El Cata" Roque, ganó el Grupo 4 frente a su compatriota Deportivo Táchira y los ecuatorianos El Nacional y Barcelona, quedando eliminado en las semifinales por los uruguayos Peñarol y Nacional.
Un año después, fue la ULA de Mérida, tras ganar un desempate con Sporting Cristal de Perú (2-1, en Cali), el que llegó a las semifinales, cayendo con el campeón Gremio de Porto Alegre y Flamengo.
Con el cambio del formato de la Libertadores, en 1988, comenzaron a clasificarse dos equipos, y un año después, tres por grupo, donde Deportivo Táchira (1989), como tercer clasificado, disputó los octavos de final, eliminado por Sol de América de Paraguay en los penales (0-3 y 3-0).
Minervén, en 1994, tras eliminar en octavos a Emelec de Ecuador, perdió ante el campeón Vélez Sarsfield de Argentina (0-0 y 0-2), con el aliciente de que el venezolano Stalin Rivas, hoy con el Caracas FC, se coronaría campeón goleador con siete tantos.
Hace cinco años, en 1999, Estudiantes de Mérida, de la mano de Richard Páez, dio la sorpresa eliminando al nacional uruguayo, a Bella Vista y al mexicano Monterrey, mientras venció a Emelec (3-1 y 0-1), cayendo eliminado de manera increíble en cuartos ante Cerro Porteño de Paraguay (3-0 y 0-4).
La realidad de esta Copa Libertadores es que los "éxitos" del fútbol de Venezuela ya son "palpables", tras los triunfos de la selección local, que dirige el técnico Richard Páez.
A falta de jugarse dos meses en la primera fase de la Copa Libertadores, el futuro de los equipos "vinotintos" en el torneo aún es muy esperanzador, al contrario de países como Chile y Uruguay, especialmente los primeros, que sus clubes pasan por "serias" crisis futbolísticas en el máximo torneo del continente.
