MEXICO.- La supuesta "esclavitud" de los futbolistas mexicanos denunciada desde España por el defensa Rafael Márquez, desató una polémica y dividió la opiniones de un sector que tiene a Hugo Sánchez como el más hombre más controvertido.
Márquez, quien es suplente en el Barcelona, denunció que en México a los jugadores se les da un trato de esclavos que contrasta con la que él vive en España.
"Es una esclavitud en cuanto a lo que es la organización en sí, el equipo y otras cosas también. Se trata como un esclavo al jugador, y no como lo estoy viviendo yo aquí, que es más una relación entre seres humanos", dijo Márquez, según reproduce el diario deportivo "Récord".
México tiene la fama de ser la liga mejor pagada de América con un centenar de jugadores sudamericanos en sus equipos, aunque al mismo tiempo sus dueños reciben críticas por hacer cada seis meses un "mercado" para comprar y vender jugadores sin tomarles mucha opinión.
La Federación Mexicana ha creado una comisión del jugador para conocer las opiniones respecto a las propuestas de mercado, aunque el organismo recibe críticas por ser una decisión de los dueños del balón, que de paso cerraron las puertas a un sindicato de futbolistas.
La declaración de Márquez, defensa de la selección mexicana, reavivó las críticas a ese "mercado de jugadores", que los dueños celebrarán en junio próximo con algunos ajustes para satisfacer los deseos de la FIFA de darles libertad a los jugadores.
El defensa del Barcelona recibió de inmediato el respaldo de Hugo Sánchez, quien vivió la realidad española como ex jugador del Real Madrid español y que como actual técnico de los Pumas de la UNAM tiene la fama de ser el más crítico de la situaciones del fútbol mexicano.
Hugo consideró que Márquez está en su papel al tomar la estafeta del jugador mexicano y aseguró que su denuncia no es nueva, pero lo respalda en su decisión de levantar la voz en defensa de los futbolistas mexicanos.
El técnico afirmó que los dueños de los equipos están preparando trampas en el nuevo mercado, para impedir que el jugador disfrute de la libertad que le marca el nuevo estatuto de la FIFA sobre estas contrataciones.
El técnico mexicano Miguel Herrera, del Atlante, no estuvo de acuerdo con el defensa del Barcelona, asegurando que en México existe una gran apertura de los propietarios de los equipos hacia los jugadores y los entrenadores.
Según Herrera, en México los jugadores no tienen grilletes ni cadenas y sólo han sido esclavos los que han querido, porque si no están de acuerdo se pueden ir de sus equipos.
