
Wallace fue vital en el bajo aporte de O’Neal en la ofensiva de los Lakers.
LOS ANGELES.- Tras la derrota en el segundo partido en los últimos segundos los Pistons devolvieron el golpe: una vez más apelaron a su gran defensa y asfixiaron a las estrellas de Los Angeles Lakers para conseguir una cómoda victoria en el tercer encuentro de la serie, disputado en Detroit, que les permite liderar la final de la NBA por 2-1.
Richard Hamilton, con 31 puntos, y Chauncey Billups, con 19, fueron los baluartes de la victoria de Detroit sobre Los Angeles por 88-68 en la noche de jueves.
"Esta noche salimos y jugamos con mucha energía", dijo Hamilton. "Hicimos un gran trabajo en las dos zonas. Compartimos el balón y todos nos ayudamos en defensa. Los chicos hicieron un gran trabajo jugando juntos", continuó Hamilton.
Tras la demostración defensiva del primer encuentro, Detroit perdió el segundo en un emocionante final resuelto por el acierto del base de Los Angeles, Kobe Bryant. En el tercer encuentro y ante un público entregado a su equipo, Detroit volvió a resaltar sus virtudes y dejó a Los Angeles en la peor anotación de la historia de Los Lakers en los playoff.
"Estoy atónito", admitió el entrenador de los Pistons, Larry Brown. "No creo que podamos defender mejor que esta noche. Les dejamos en 68 puntos y un porcentaje de 40 por ciento. Es un logro increíble. Jugamos tan bien como podemos".
El pivot estrella de los Lakers Shaquille O’Neal nunca anotó menos de 25 puntos en los 21 partidos de finales de la NBA que disputó hasta ahora, pero en en esta ocasión se quedó en 14, metiendo sólo dos puntos en la segunda mitad.
"Hice 14 tiros", dijo O’Neal que estuvo bien maniatado por la defensa de Ben Wallace. "Creo que es la primera vez en diez años que sólo voy una vez a los tiros libres", añadió Shaquille O’Neal.
Por su parte Kobe Bryant acabó con 11 puntos con un porcentaje del 36,5 por ciento en tiros de campo. "Hicieron una excelente defensa y no supimos jugar", dijo Bryant que anotó 4 de sus 13 lanzamientos.
Los Lakers eran los grandes favoritos para hacerse con su cuarto anillo de campeón en cinco años, pero después de tres partidos, los Pistons son ahora los que tienen todas las opciones.
"Estamos ante un gran reto al estar abajo 2-1 y jugar los próximos dos partidos en su cancha", añadió preocupado Kobe Bryant, que anotó 33 puntos en el segundo partido, incluyendo el triple decisivo, pero que en la noche de ayer se vio sujetado por la excelente defensa de Tayshaun Prince, que además anotó 11 puntos.
"Intenté utilizar mi envergadura", dijo Prince. "El es más rápido pero yo soy más alto así que le puse en dificultades, cuando le das un paso de ventaja es cuando te pasa y anota", explicó sobre la defensa a Bryant.

La vergüenza para los Lakers fue total. Bryant no sabía dónde esconderse.
Con Kobe anulado, los Pistons se fueron con ventaja al descanso 39-32, con 14 puntos de Hamilton.
"En la primera parte le dije a mi equipo que no creía que pudiéramos jugar peor que lo que lo habíamos hecho hasta entonces", reconoció el entrenador de Los Angeles, Phil Jackson.
Los Pistons sentenciaron el encuentro en el segundo periodo. Billups y Hamilton dieron una ventaja de 16 puntos a los Pistons, que era de 12 al comienzo del último cuarto.
Pero los Lakers no fueron amenaza en los últimos 12 minutos. A pesar de todo, el técnico de los Pistons, Larry Brown, espera resistencia en el cuarto partido.
"Son un equipo especial, con un gran entrenador", explicó Brown. "Tienen jugadores orgullosos que estarán dispuestos a hacer su mejor partido y tengo que hacérselo entender a mis jugadores", continuó.