Pese a ser el máximo encestador, Bryant no pudo solo con los Pistons.
AUBURN HILLS.- El escolta Kobe Bryant, que había "garantizado" que Los Angeles Lakers iban a ganar el quinto partido de las finales de la NBA, tuvo que admitir después de la derrota y humillación que sufrieron al perder 100-87 ante los Pistons de Detroit, que los Pistons fueron superiores.
"Desde el comienzo intente entrar en juego, lo mismo que el resto de los compañeros, pero el esfuerzo fue inútil porque los Pistons nos superaron en todos los aspectos", declaró Bryant, que fue el máximo encestador de los Lakers con 24 puntos, pero volvió a fallar 14 de 21 tiros de campo.
Bryant, de 25 años, que ahora se tendrá que seguir enfrentando al asunto del juicio que se le va a seguir por la presunta violación a una joven de 19 años en Colorado, no quiso hacer comentarios sobre su futuro y se limitó a decir que quería "descansar" con su familia.
"No es el momento de hablar de mi futuro, entre otras cosas porque todavía tengo contrato con los Lakers", señaló Bryant, que fue el único que gracias a su triple milagroso en el segundo partido evitó la barrida de su equipo.
Bryant sí dijo que había ido a abrazar a Larry Brown porque era una gran persona y un excelente profesional que se mereció junto a su equipo el título por todo lo que hicieron en el campo.
"La garantía que había dado que íbamos a ganar el quinto partido tenía como base el que lucharíamos por conseguirlo, pero al final nunca pudimos entrar en acción y nuestro esfuerzo no fue suficiente", agregó Bryant.
