SOUTHAMPTON.- El sudafricano Retief Goosen, con 276 golpes, cuatro bajo el par, se impuso hoy en dramático duelo en los últimos hoyos al estadounidense Phil Mickelson, para conquistar la 104 edición del US Open de Golf en los campos de Shinnecock Hill de Southampton, estado de Nueva York.
El sudafricano, que ya ganó este torneo el 2001, dijo: "Mi 'putt' me funcionó muy bien. Estuve acertado la mayor parte de las veces y creo que la fortuna me acompañó cuando caí en una trampa de arena. Sabía también que los dos últimos hoyos serían los más difíciles".
"Estaba convencido de que el juego se definiría con el 'putt' y por eso me esmeré en colocar la pelota en situaciones ventajosas", agregó feliz Goosen, quien al terminar su jornada fue felicitado por su esposa y abrazó a su pequeño hijo.
Goosen, que avanzó desde el cuarto lugar en la segunda jornada, hasta apoderarse del primer puesto el sábado, conectó hoy 71 golpes, uno sobre el par, pero se las arregló para mantener su ventaja con tres "birdies" a pesar de cinco "bogeys".
La lucha en la última jornada estuvo planteada con Mickelson, el ganador del Masters de Augusta hace dos meses. El zurdo estadounidense se mantuvo en la lucha hasta el final, pero acabó a dos golpes del vencedor.
El australiano Robert Allenby fue el único que hizo hoy el par 70 de la cancha para compartir el sexto lugar con el estadounidense Steve Flesh.
Jeff Maggert, de Estados Unidos, ocupó el tercer lugar con 281 impactos, seguido por el japonés Shigeki Maruyama, colíder hasta la segunda ronda y el canadiense Mike Weir.
Entre los hispanoamericanos el mejor situado en la clasificación final fue el argentino Angel Cabrera, en el puesto 16 pese a sus ocho "bogeys" y sólo tres "birdies". Cabrera parecía llamado a grandes cosas en la primera jornada cuando estuvo de colíder, pero su desempeño fue de más a menos. Finalizó con 289, nueve sobre el par.
Menos afortunado estuvo el español Sergio García. Incurrió en 11 "bogeys" contra un sólo "birdie" para una jornada de 10 sobre el par 80. Su total en las cuatro jornadas fue de 291 impactos, 11 sobre el par.
Goosen comenzó la cuarta ronda con un "birdie" en el primer hoyo de par cuatro, algo que sólo otros dos jugadores lograron el domingo, para ponerse como líder temporalmente seis bajo par, pero desperdició la ventaja casi de inmediato al incurrir en "bogey" en el segundo, y luego en el octavo, el décimo y decimocuarto hoyo.
Por su parte Mickelson comenzó su jornada con dos sólidos pares antes de su primer "bogey" en el tercero, para recuperarse con un "birdie" en el cuarto. Se apuntó luego una seguidilla de pares antes de caer otra vez en "bogeys" en los hoyos 10 y 12. Enseguida enmendó el rumbo con tres "birdies" que lo colocaron momentáneamente en la punta ante el delirante aplauso de la multitud.
La fortuna se le esfumó en el decimoséptimo hoyo por un doble "bogey".
Tiger Woods, el mejor jugador del mundo que empezó el día con cuatro bajo el par, tuvo una jornada para el olvido y no amenazó en ningún momento a los líderes. En el hoyo 8 se anotó "bogey", uno doble en el 9 y otro "bogey" en el 10, que acabó sepultando sus esperanzas de reverdecer laureles.
Este fue el octavo torneo grande en que Woods no logra el triunfo, en una sequía que amenaza el primer lugar que ha ocupado en el mundo en los últimos tiempos.
Woods terminó su desempeño con un total de 290 impactos, 10 sobre el par después de una cuarta ronda de 76, su peor registro en el US Open desde que se convirtió en profesional.
