VILLARREAL.- Manuel Pelegrini, entrenador del Villarreal, señaló hoy que su mayor preocupación de cara al partido de vuelta de las semifinales de la Copa Intertoto, que este miércoles jugará en Hamburgo, es mantener el nivel de juego exhibido por su equipo durante este inicio de campaña.
"Ir con una ventaja de 1-0 no es mayor preocupación que cuando fuimos a Rusia con un marcador idéntico. La única preocupación es poder mantener el nivel que hemos mostrado", indicó.
El técnico chileno se mostró confiado en que el Hamburgo abra sus líneas y se muestre más ofensivo en su estadio de lo que lo hizo la pasada semana en Villarreal.
"Tenemos algo a favor y es que confío que con el resultado adverso el equipo alemán salga con otras condiciones de juego. Aquí jugaron con ocho defensores cerca de su área. Seguramente allí sus carrileros van a estar más adelantados, van a tener mayor presión, y eso va a potenciar que les podamos hacer daño a su defensa", indicó.
El preparador del conjunto castellonense reconoció que ha preparado durante la semana la manera de contrarrestar el poderío por alto del conjunto alemán, así como su juego directo.
"En el juego directo o en los balones centrados van a tener mayor ventaja que nosotros, pero seguro que raseando la pelota nosotros tendremos que intentarlo, porque tenemos más calidad y para ello hemos trabajado durante toda la semana para romper ese sistema ofensivo del Hamburgo", indicó.
Respecto a la baja del ariete brasileño Sonny Anderson, Pellegrini reconoció que es una ausencia importante, aunque confía en que su sustituto esté a la altura.
"Anderson, en el entrenamiento ayer, tenía unas pequeñas molestias en la rodilla y hemos decidido que parara y descansara. Es una baja muy importante, sabemos de la importancia y el buen momento por el que atraviesa, pero creo que el plantel esta estructurado para que cuando se produzcan este tipo de situaciones durante todo el año por bajas y sanciones, tengamos sustitutos, como en este caso Víctor o Guayre", comentó.
El entrenador aseguró que aunque la baja de Anderson puede restar experiencia sobre el terreno de juego, su equipo esta habituado a soportar la presión en estadios rivales.
"En todos los campos hay presión y seguro que el equipo no la va a sentir por más que el Hamburgo meta 30 ó 40.000 personas en su estadio. Lo importante es que podamos mantener el mismo nivel de juego que estamos desarrollando", concluyó.
