LONDRES.- A sólo nueve días del inicio de los Juegos de Atenas, el Comité Olímpico Internacional (COI) quedó hoy otra vez bajo la sombra de la corrupción al sugerirse que casi la mitad de sus miembros venden sus votos a razón de entre 100.000 y hasta 200.000 dólares por persona.
La denuncia, lanzada hoy por el programa de TV Panorama, de la cadena BBC, incluye a cuatro agentes vinculados con el olimpismo que aseguran controlar un total de 54 de los 128 miembros que votan en el COI, uno de los cuales, el búlgaro Ivan Slavkov, aparece en persona en la filmación.
El presidente del Comité Olímpico Búlgaro viola los reglamentos del COI al reunirse con un empresario interesado en una sede olímpica, con el cual sugiere además claramente la posibilidad de un arreglo económico.
Slavkov acepta reunirse en el piso 99 de un edificio en Sofía, en un restaurante, le dice al empresario que sabe quién es él, le admite que está "abierto a negociaciones" y le agrega que hay miembros del COI que son "hombres de negocios" y aceptan "ofertas" que interesen en sus respectivas actividades.
El "empresario Justin Ionides", es en realidad el periodista Justin Rowlands, de la BBC, que fingió representar a la firma New London Ventures, dispuesta a comprar votos para que en julio de 2005 Londres gane la sede de los Juegos de verano de 2012, para los que también compiten París, Madrid, Nueva York y Moscú.
La reunión con Slavkov fue arreglada por Goran Takac, hijo de Arthur Takac, un asesor clave del ex presidente del COI, Juan Antonio Samaranch y, él mismo, agente olímpico actual, que se jacta en la filmación de poder "influenciar" entre 15 y 20 votos del COI, de los cuales entre 7 y 10 requieren pagos en efectivo.
Takac, quien sugiere una reunión, finalmente frustrada, hasta con uno de los actuales vicepresidentes del COI, el ruso Vitaly Smirnov, dice a los falsos empresarios que para ello precisa 900.000 euros pagaderos en tres cuotas y un presupuesto total para el operativo de entre 2 y 3 millones de euros.
El tercer agente es entrevistado en El Cairo, Mahmood El Farnawani, quien afirma poseer un mínimo de "14 votos" cotizados en 100.000 euros cada uno, tras lo cual el programa se traslada a Kuwait para dialogar con un cuarto agente Muttaleb Ahmad, director general del Comité Olímpico de Asia.
Ahmad, asistente del jeque Ahmad Al-Fahad Al-Sabah, de Kuwait, recibió 62.000 dólares de honorarios de los organizadores de los Juegos de invierno de Salt Lake City 2002.
La BBC decidió omitir una declaración de Takac -obtenida con cámara oculta- en la que éste menciona, nombre por nombre, a una treintena de dirigentes del COI que recibirían dinero por su voto.
La cadena inglesa afirmó que entregará igualmente esa cinta al COI para colaborar con la investigación iniciada por esa entidad, que ya había vivido un gran escándalo de corrupción en 1999, tras las denuncias por la votación de Salt Lake City, que provocaron la expulsión de seis miembros y la renuncia de otros cuatro.
La nueva denuncia significa un duro golpe a la política de transparencia iniciada por el nuevo presidente del COI, el belga Jacques Rogge, quien arribó hoy mismo a Atenas para los Juegos de 2004, pero eludió referirse al escándalo.
En los últimos meses dos miembros COI (el vicepresidente surcoreano Kim Un Yong y el indonesio Bob Hassan) debieron ser suspendidos, mientras que el mexicano Ruben Acosta renunció, luego de que los tres también fueron implicados en denuncias de corrupción.
El Comité Olímpico de Bulgaria intentó en las últimas horas defender a su presidente Slavkov, quien además es yerno del ex lider comunista Todor Zhivkov y dirige también la liga de fútbol de ese país, afirmando que la denuncia busca afectar la postulación de Sofía como sede de los Juegos de invierno.
El Comité procandidatura de Londres, presidido por el ex atleta Sebastián Coe, reiteró que jamás violó los reglamentos del COI, en tanto el representante de la postulación de Madrid, César Mayoral, aclaró que la capital española "está limpia" y que "los órganos competentes deberán juzgar si hubo corrupción" en la puja por la sede de los Juegos de 2012.