COLONIA.- El "Dream Team" de Estados Unidos necesitó de un triple de Allen Iverson casi al terminar el partido, para lograr una victoria por 80-77 sobre la selección de Alemania, un quinteto que ni siquiera se clasificó a los juegos de Atenas.
Un día después de haber caído por 95-78 ante el poco reconocido equipo de Italia, el conjunto estadounidense, repleto de jugadores estelares de la NBA, celebró un triunfo de último segundo sobre Alemania, y lo festejaron como si hubiera sido un campeonato de la NBA.
Cuando Iverson encestó su segundo tiro de tres puntos en el último segundo de partido, el dos veces Jugador Más Valioso de la NBA, Tim Duncan, elevó un dedo índice al cielo como indicando que "somos los número uno", mientras otros miembros del equipo le saltaron encima al anotador para festejar la victoria.
Iverson había dicho anteriormente que nunca había logrado el lanzamiento del triunfo en ningún nivel, ya fuera secundaria, Universidad o profesional.
El jugador más importante de los alemanes, el astro de los Dallas Mavericks, Dirk Nowitzki, parecía haber enviado el partido a tiempo extra al encestar un disparo de tres puntos entre dos defensas para empatar el marcador a 77 puntos, cuando quedaban 3,2 segundos en el partido.
Sin embargo, Iverson, uno de los dos capitanes del equipo estadounidense, vino con su propio disparo después de haber calificado la derrota en contra de Italia como "un llamado para despertar", pues la diferencia de 17 puntos en el marcador ha sido el peor margen de derrota para cualquier equipo estadounidense cargado de jugadores de la NBA.