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De Gavardo vuelve desilusionado pero fuerte mentalmente

El piloto contó que sufrió "una de las horas más duras de mi vida", cuando a cerca de dos kilómetros del enlace de la última etapa, su vehículo se detuvo definitivamente. Ahí perdió el Rally de Oriente.

10 de Agosto de 2004 | 12:21 | Felipe Vásquez, El Mercurio en Internet

Las horas negras
Como todas las mañanas de competencia, De Gavardo a las 4:30 ya estaba en pie para cumplir el último trazo del recorrido, en el raid que lideraba con amplia ventaja. A las 5:30, cerca de 45 minutos de su hora de partida, el "Cóndor" tomó su moto para alejarse a unos 400 metros del campamento. "Me cargan los baños químicos", explica como motivo de su acción.

Cuando quería regresar, la moto no le respondió. Desesperado debió impulsar su pesado vehículo hasta el campamento, para pedir la asistencia del mecánico. Un cambio de batería surgió efecto y, tras larga espera, De Gavardo pudo iniciar el enlace (12km) en terreno pavimentado.

Cuando llevaba recorrido dos o tres kilómetros, la moto volvió a detenerse. Otros corredores pasaban a su lado extrañados por la detención del chileno, hasta que uno de ellos regresó al campamento para pedir ayuda.

La asistencia mecánica llegó más tarde, pero no encontraban la solución. Ni siquiera encontraban el problema. Media hora después, el piloto ya se le repetía a si mismo: "Ya se acabó la carrera". Tres minutos antes de ser descalificado, De Gavardo pudo llegar al inicio de la especial, pero con una penalización que le despojó del título que ya acariciaba.
SANTIAGO.- El motociclista nacional Carlo de Gavardo retornó desilusionado al país tras ocupar el tercer lugar en el Rally de Oriente, recién disputado sobre tierras turcas.

De Gavardo sufrió desperfectos en su motocicleta que le impidieron iniciar la especial de la última etapa a tiempo, sufriendo una penalización que lo privó de un triunfo que tenía prácticamente asegurado.

El piloto comentó que ese momento fue "una de las horas más duras de mi vida", cuando tras cerca de dos kilómetros del enlace, su vehículo se detuvo definitivamente.

"Me siento triste porque lo tenía en la mano (el triunfo) y todavía no tengo a qué echarle la culpa", declaró el piloto, quien presume que fue un problema eléctrico el que detuvo su buena racha en la carrera que finalizó el sábado recién pasado.

De Gavardo negó que los problemas hayan surgido a partir de un sabotaje, indicando que "la moto la llevaba al máximo todos los días para competir con los más grandes (...) y ahí es cuando surgen los problemas". De Gavardo conducía una moto de 450 cc, con 660 de la mayoría de sus rivales.

El piloto adelantó que su vehículo será desarmado y examinado en la fábrica de KTM por el mecánico que lo acompañó durante la carrera, Marc Webber. "Estoy seguro que es un detalle", confidenció De Gavardo.

Ante el resultado inesperado, el piloto dijo estar contento de todos modos "porque siento que estoy volviendo a ser lo que era. Me di cuenta que cada vez estoy más rápido, estoy más seguro".

Las exigencias en Turquía

De Gavardo se dio tiempo de explicar en detalle las severas complicaciones que le puso en frente el Rally de Oriente. "Era muy duro para mí psicológicamente, porque era la única moto de 450", explica.

La geografía del trazado tampoco era un fácil escollo. La mitad del terreno era cordillera, con mucha tierra y rocas, similar al sector donde el chileno efectúa sus entrenamientos en el norte. La otra mitad eran campos agrícolas que permitían altas velocidades. "Lo que ganaba arriba en la cordillera, lo perdía abajo", especificó.

El clima también fue un factor adicional a considerar. Altas temperaturas (38° a 35°) y lo seco del ambiente, significaban nuevos obstáculos para el chileno. La prueba le exigía trabajar de cerca con su hoja de ruta, que constantemente sufría cambios, y no depender del sistema GPS.

Lo que viene para el de Huelquén

De Gavardo tendrá una breve preparación en el norte del país, previa a su participación en el Rally de los Faraones (25 de septiembre). Posteriormente, intervendrá en los rallies de Dubai y Las Pampas, en octubre y noviembre, respectivamente.

Sin embargo, antes se tomará unos días para estar junto a su familia y descansar del esfuerzo hecho en Turquía.

De Gavardo luego preparará su nueva participación en el Rally Dakar, donde aseguró estar prácticamente definido en correr sobre la moto de 450cc, aunque esto le cueste la disputa del cetro en la tradicional prueba euroafricana.