
Costas Kenteris, tras declarar ante la Comisión del COI.
ATENAS.- Los velocistas griegos Kostas Kenteris, campeón olímpico de 200 metros, y Ekaterini Thanou, subcampeona de 100, han anunciado hoy que se retiran de los Juegos Olímpicos de Atenas, tras declarar ante la Comisión Disciplinaria del COI.
La audiencia había sido retrasada dos veces. El sábado pasado se aplazó por 48 horas en atención a la recomendación de los médicos, y el lunes volvió a retrasarse otros dos días por la misma causa.
Kenteris y Thanou, apartados del equipo a la espera de que el COI tome una decisión sobre su caso, sufrieron la madrugada del viernes un accidente de moto que está siendo investigado por la policía, horas después de no estar localizables cuando un oficial enviado por el COI se presentó en la Villa Olímpica para someterlos a un control de dopaje.
Kenteris dijo a la salida del encuentro con la Comisión del COI que Grecia "está organizando esta gran fiesta para la que ha esperado 108 años" y que por "sentido de responsabilidad" tomó esta decisión.
El velocista aseguró que nunca había tomado sustancia prohibida alguna y que tampoco le avisaron en su día de que tenía que pasar un control. "En los últimos cuatro años he pasado más de treinta controles y nunca ha pasado nada", dijo el atleta griego, quien también anunció que rompía con su entrenador, Christos Tsekos.
Thanou, mientras tanto, pidió "perdón" al pueblo griego y dijo que "para un atleta es difícil retirarse de unos Juegos especialmente si pertenece al país que los organiza".
La velocista, quien no había sido inscrita en la prueba de 100 metros por el Comité Olímpico Griego, según había anunciado Georges Gakis, su portavoz, explicó que la Comisión Disciplinaria del COI no examinó el dopaje en sí, sino si eludieron el control, y deseó "buena suerte al resto de los atletas griegos".
El abogado de ambos, Michalis Dimitrakopoulos, resaltó que por el momento no hay condena ni castigo, sino que los atletas se sacrificaron para que la opinión pública no se ocupara de un asunto "inexistente".
Dimitrakopoulos comentó que Kenteris y Thanou entendieron que el hecho de que los periodistas se ocupasen de esta "maquinación" era perjudicial a los Juegos, por lo que "se dieron cuenta que tenían que retirarse, que se lo debían al país", para que todo el mundo se centrara en la competición.
El letrado apuntó que se presentaron documentos sobre la inocencia de los dos atletas -sobre el hecho de si habían evadido el control-, pero que los deportistas consideraron que tenían que dimitir ante la posibilidad de que el caso se demorase otros dos o tres día porque "aún hay capítulos que revisar".
El entrenador Christos Tzékos anunció también que había entregado a la Comisión Disciplinaria su acreditación olímpica después de haber presentado evidencias.
Tzékos aseveró que no ha cometido errores, pero que asume "toda la responsabilidad", y puntualizó que "todo este ruido es perjudicial para los deportistas".