ATENAS.- "No podía defraudar a mi gente", aseguró el tenista nacional Nicolás Massú tras haber ganado el oro olímpico de Atenas, en un agónico partido de casi cuatro horas el día después de que ganara la competencia de dobles junto a Fernando González.
"El público me apoyó y eso me sorprendió. Me querían como si fuera griego. Cuando estaba mal en el partido, miraba a donde estaban todos los deportistas chilenos y los técnicos y eso me ayudó. No les podía defraudar. Si perdía esta final siempre estaría en mi memoria", aseguró.
El viñamarino aseguró que hoy es "el día más importante" de su vida y afirmó que por fin logró "lo que buscaba". El tenista reconoció que temió perder el partido cuando el estadounidense Mardy Fish se puso arriba, pero que tuvo fe en su juego. "Si tengo una virtud esa es la mentalidad y cuando estoy mentalmente bien es difícil que me ganen", acotó.
Massú aseguró que "se sobrepuso a la fatiga y a los dolores para buscar la victoria. Era el momento de dejar todo en la cancha sin importar los dolores. Les dije a los técnicos que no me importaba lesionarme ni nada, que lo que quería era ganar ese partido".
"Es el mejor día de mi vida, es increíble. Vine para hacer lo mejor posible y me voy con dos medallas de oro. Es algo que recordaré siempre", sostuvo.
Reconoció que se emocionó al final del encuentro "por las muchas horas de entrenamiento que supone llegar hasta aquí. Ahora me puedo morir contento", comentó exhausto después del encuentro.