ATENAS.- A pesar de todos sus tropiezos, Estados Unidos se despidió de los Juegos Olímpicos con una medalla en el básquetbol masculino, aunque no del metal que vinieron a buscar.
Jugando por orgullo y revancha contra uno de los tres equipos que les ganó en el torneo, los estadounidenses vencieron por 104-96 a Lituania en el partido por la medalla de bronce.
Los estadounidenses perdieron tres veces en el torneo, después de haber acumulado apenas dos derrotas en todas sus participaciones olímpicas anteriores.
También cayeron por primera vez en una olimpiada desde que comenzaron a usar jugadores profesionales en 1992.
Shawn Marion encestó 22 puntos, Allen Iverson 14 y Lamar Odom y Stephon Marbury 14, cada uno, para encabezar la ofensiva norteamericana.
Al igual que en su victoria de cuartos de finales sobre España, los tiros a distancia fueron la clave en el triunfo. Los estadounidenses fallaron cinco intentos de tres en la primera mitad, pero acertaron ocho en la segunda, incluyendo cuatro en el último cuarto.
El comienzo del partido fue retrasado 48 minutos, luego que ambos equipos llegaran vestidos con uniformes blancos. La segunda mitad comenzó sin entrenadores en el banco estadounidense, con Larry Brown saliendo del camerino 50 segundos después del comienzo de la acción.
Estados Unidos abrió con ventaja de 22-13, acorralando a los lituanos con una energética defensa para crear oportunidades de contragolpe.
Lituania, sin embargo, contraatacó con tres triples consecutivos, incluyendo uno que se convirtió en una jugada de cuatro puntos, para tomar delantera de 23-22.
Tim Duncan nuevamente se metió en problemas de faltas personales y pasó todo el segundo parcial sentado en el banco. La primera mitad terminó 49-44 a favor de Estados Unidos.
Estados Unidos había ganado todas las medallas de oro olímpicas menos dos: en 1988 en Seúl, y en 1972 en Munich.