
BERLIN.— Brasil intentará este miércoles amargarle el debut en casa a Jürgen Klinsmann como técnico de Alemania, en un partido amistoso que reeditará la final de la última Copa Mundial.
El choque en el renovado Estadio Olímpico ofrece a los germanos la ocasión para tomarse un sorbo de revancha por la derrota 2-0 que sufrieron en la final del Mundial de 2002, en la que Brasil conquistó su quinto título.
También será una oportunidad para medir fuerzas con miras al Mundial de Alemania en 2006, precisamente en el estadio donde se escenificará la final.
"Es un partido muy trascendental en el camino al mundial y es un magnífico examen", declaró Klinsmann, quien tomó las riendas en relevo de Rudi Voeller, luego que Alemania fue eliminada en la primera ronda de la Eurocopa.
En Brasil, Ronaldo y Ronaldinho, autores de goles ante Bolivia, encabezan el equipo de Carlos Alberto Parreira, que no trajo a varias otras figuras como Cafú, Dida y Kaká, del Milan de Italia.
Tampoco se llamó a Lucio y Zé Roberto del Bayern Munich en señal de protesta porque los dos clubes no los cedieron para una amistoso ante Haití.
Parreira afirmó que el partido sirve como una prueba "para saber en qué nivel estamos" e "ir ganando ritmo de juego".
Para Klinsmann, que salió campeón como delantero de la selección en el Mundial de Italia ’90, el gran objetivo por ahora es inyectar una dosis de ánimo en un equipo con las luces apagadas tras su fracaso en Portugal.
Ambos equipos vienen de conseguir victorias por 3-1. Brasil lo hizo ante Bolivia el domingo para confirmarse como líder de las eliminatorias de Sudamérica, mientras que Alemania derrotó a Austria el mes pasado en Viena, el primer partido oficial de la era Klinsmann.
De hace tiempo Alemania no le gana a ninguno de los grandes del fútbol mundial, y para ello habría que remontarse al triunfo 1-0 sobre Inglaterra en octubre de 2000. Los tricampeones mundiales han perdido ocho partidos e igualado otro en duelos con las potencias tradicionales.
Históricamente, la balanza Alemania-Brasil favorece a los sudamericanos, con 11 victorias en 18 partidos. Pero los alemanes no conocen la derrota en Berlín desde hace 31 años, cuando perdió 1-0 precisamente ante Brasil.
Al arquero Oliver Kahn se le presentará la oportunidad de redimirse ante Ronaldo, quien anotó el primero de sus dos goles en la final de 2002 tras un craso error de Kahn.
Uno de los primeros cambios de Klinsmann al tomar el cargo fue quitarle el brazalete de capitán a Kahn y se lo dio al volante Michael Ballack, quien no jugó la final del 2002 por estar suspendido.
Probables alineaciones:
ALEMANIA: Oliver Kahn; Andreas Hinkel, Frank Baumann, Frank Fahrenhorst, Philipp Lahm; Sebastian Deisler, Michael Ballack, Torsten Frings, Bernd Schneider; Gerald Asamoah y Kevin Kuranyi.
BRASIL: Julio César; Belletti, Edmilson, Roque Junior, Roberto Carlos; Gilberto Silva, Renato, Ronaldinho, Edú; Adriano y Ronaldo.