ROMA.- La Roma espera con gran impaciencia la decisión de mañana de la Comisión Disciplinaria de la UEFA, tras la agresión sufrida por el árbitro sueco Anders Frisk, que motivó la suspensión del partido con el Dinamo de Kiev en el estadio Olímpico, pues está en juego su presente y futuro continental.
La decisión de la Comisión Disciplinaria de la UEFA es esperada para la tarde de mañana, pero debido a la importancia del asunto no sería de extrañar que se aplazase hasta la mañana del miércoles. Antes de ello, sus componentes estudiarán, especialmente, los informes del árbitro, del cuarto juez y del delegado UEFA.
Horas que mantienen en vilo a una Roma sabedora de que le espera una dura sanción, pero que confía en no ser apartado de las competiciones europeas.
Una Roma que ha hecho llegar a la sede del organismo, en Suiza, su informe de defensa, compuesto de algo más de una treintena de páginas en las que se intenta dar una visión detallada de lo acontecido en un partido, que fue suspendido al descanso, al ser alcanzado Frisk camino al vestuario por una moneda lanzada desde las gradas, que le provocó un corte en la frente y abundante sangre. En ese momento, el Dinamo de Kiev ganaba por 1-0.
Así, la Roma, en su documentación, presenta testimonios como los del Gobernador Civil y del jefe de la Policía, quienes garantizan que se habían adoptado todas las medidas de seguridad posible, así como el parte médico del árbitro que apuntaría a que su herida no era grave y se trataba de un centímetro de longitud que no precisó de sutura.
La Roma, pese a ser reincidente, confía en que el castigo de la UEFA no sea excesivo y que, dándose descontado que se le dará perdido el partido por 0-3, la sanción se quede en un máximo de tres partidos de clausura del estadio Olímpico.
Se intenta, pues, que la Roma no sea apartado de las competiciones continentales, lo que uniría al desastre deportivo y un claro perjuicio económico, que según dijo hace días Rosella Sensi, administradora delegada del club romano, ha sido valorado en unos 20 millones de euros.
Una vez conocida la sanción, la Roma dispondrá de tres días para presentar su hipotético recurso.