BEIJING.- La estadounidense Serena Williams y la rusa Svetlana Kuznetsova disputarán el domingo la final del torneo de tenis Abierto de China, que reparte premios por 585.000 dólares.
Williams, primera favorita, venció a la rusa Vera Zvonareva, cuarta preclasificada, por 6-2 y 6-3, mientras Kuznetsova, segunda cabeza de serie, se impuso a su compatriota Maria Sharapova, tercera cabeza de serie por 6-2 y 6-2.
El encuentro entre las dos rusas que se había declarado como una batalla por la supremacía del tenis femenino en su país, fue dominado sin muchas dificultades por la ganadora del Abierto de Estados Unidos frente a la campeona de Wimbledon.
Sólida y potente, Kuznetsova alcanzó el título en EE.UU. con un tenis de mucha fuerza, llevado adelante con una gran determinación y dejando de lado los nervios de la juventud y apenas una semana después ganó el torneo de Bali, antes de llegar ahora a la final en China.
Kuznetsova llegó a Flushing Meadows como la cuarta tenista de su país, detrás de Anastasia Myskina, campeona en el Abierto de Francia, Elena Dementieva y Sharapova.
La jugadora de 19 años nacida en San Petersburgo avanzó con firmeza en el cuadro de Flushing Meadows y cedió nada más que un set en su camino a la final, en la que superó a Dementieva.
En Bali y ahora en Beijing ha demostrado que es una seria aspirante a ser la número uno en un breve tiempo.
Pese a que se mudó a España cuando era muy chica, su primer contacto con el tenis fue en Rusia, donde mejoró su juego bajo la atenta mirada de su padre, el entrenador olímpico de ciclismo Alexandr Kuznetsov y más tarde aprendió muchos secretos en las canchas Barcelona de la mano de Arantxa Sánchez-Vicario.
