ROMA.- El técnico alemán Rudi Voeller presentó esta noche la dimisión de su cargo de entrenador de Roma, tras el partido perdido por su equipo en terreno del Bolonia (3-1), de la cuarta jornada de la primera división italiana de fútbol.
De momento, el director deportivo del Roma, Franco Baldini, está intentando convencer a Voeller para que dé marcha atrás y no haga efectiva su decisión. Pero el técnico alemán ha hecho ver que sigue firme en su determinación.
La dimisión de Voeller llegó apenas terminado el encuentro, claramente desilusionado con la actitud de su equipo, que cayó netamente en Bolonia ante un rival que jugó con nueve durante casi toda la segunda mitad.
Y es que en el Bolonia fueron expulsados, ambos por doble cartulina amarilla, el delantero Giacomo Cipriani (m.39) y el centrocampista griego Theodoros Zagorakis (m.51). Eso sí, ya con 3-0 en el marcador.
El Roma tan sólo logró recortar su distancia con un gol de Francesco Totti (m.60), en disparo lejano, pero lejos de reaccionar siguió mostrando una penosa imagen.
Precisamente, la actitud mostrada por los jugadores es lo que ha motivado que Voeller, apenas llegado al vestuario tras terminar el partido, haya anunciado a los dirigentes del Roma su dimisión del cargo al considerar que no es seguido por los jugadores.
Franco Baldini, a quien Voeller comunicó directamente que dejaba el cargo, ha solicitado al técnico alemán que de marcha atrás -lo que inicialmente el técnico ha desechado- y que hasta mañana domingo, antes del entrenamiento matutino, se mantenga en su cargo en la intención de que en el frío y tranquilidad de la noche decida no irse.
Pero ello parece ser más una esperanza de Baldini que una realidad, pues Voeller sigue manteniéndose en su postura.
"He intentando convencer a Voeller porque él no es responsable. El máximo responsable soy yo, pues soy quien le ha puesto a disposición estos jugadores. El acaba de llegar y apenas ha tenido tiempo para trabajar. Estoy también triste porque me ha anticipado, pues quien tenía que dimitir primero era yo", dijo Baldini.
El director deportivo del Roma, que fue el gran valedor del fichaje de Voeller como sustituto de un Cesare Prandelli que dejó su cargo en agosto por una grave enfermedad familiar, ha reconocido haber sentido una cierta "vergüenza" ante el espectáculo dado por el equipo ante el Bolonia.