SANTIAGO.- El técnico chileno Manuel Pellegrini firmó, con la derrota del sábado pasado ante Atlético de Madrid, el peor inicio del Villarreal en primera división. El equipo amarillo, que suma tres puntos en las primeras cinco jornadas, iguala los resultados del arranque de la temporada 2003-2004. Sin embargo, el conjunto castellonense ahora no ha marcado ni la mitad de los goles que en aquella ocasión, en la que promedió un tanto a su favor por partido.
Hace dos campañas, el Villarreal comenzó la liga con un empate en El Madrigal frente a Osasuna, lo que le valió a Víctor Muñoz la destitución tras caer eliminado de la Copa del Rey tres días después. "Paquito" se hizo cargo entonces del equipo para afrontar el partido en Valladolid y a la espera de que el club cerrase el fichaje del sustituto del entrenador aragonés. Los amarillos perdieron aquel encuentro (1-0) en el Nuevo José Zorrilla. La jornada siguiente, y con Benito Floro ya como entrenador, el Villarreal perdió en casa por 0-1 frente al Alavés. Siete días después los castellonenses empataban en Santander (1-1) y después hacían lo propio en el campo del Rayo Vallecano, esta vez a dos goles.
Así, en cinco jornadas, tres de las cuales el Villarreal jugó fuera de casa, igual que ahora, los amarillos sumaron tres puntos gracias a sendos empates, pero marcaron cinco goles a favor, es decir, una media de un tanto por encuentro.
Ahora, y también tras cinco jornadas, el equipo de Manuel Pellegrini ha sumado los mismos puntos, un total de tres, pero sólo ha marcado dos goles, menos de uno por partido.
Villarreal volverá a los entrenamientos esta mañana tras disfrutar ayer de una jornada de descanso. Pellegrini confía en recuperar a algún jugador para el partido ante el Hammarby por la Copa UEFA, aunque el único que podría estar listo a tiempo es Juan Román Riquelme, que arrastra un golpe en el costado, que le obligó a perderse el choque en el Vicente Calderón.
