RIO DE JANEIRO.- El veterano delantero brasileño Romario, fiel a su polémica trayectoria, se proclamó hoy "el mejor futbolista brasileño después de Pelé", al anunciar el partido homenaje con el que se despedirá de los compromisos internacionales.
"Me considero el más importante de la selección. Sé que voy a crear otra polémica, pero reafirmó que soy el principal jugador después del Mundial de 1970", afirmó Romario en una conferencia de prensa que ofreció en Río de Janeiro.
El atacante, que tiene 38 años y actualmente juega en Fluminense de Río de Janeiro, anunció que el 11 de noviembre cerrará su carrera internacional con Brasil en un amistoso entre un combinado de brasileños y mexicanos.
La despedida será un amistoso entre jugadores del seleccionado de Brasil que logró el tetracampeonato en el Mundial de 1994 y otros futbolistas, que también servirá de homenaje al ex arquero azteca Jorge Campos.
"Será una fiesta para conmemorar los diez años de la conquista del tetracampeonato y mi retiro de los compromisos internacionales con la selección", explicó Romario.
El partido se disputará en el Coliseum de Los Angeles y entre los brasileños que ya confirmaron su presencia están Bebeto, Jorginho, Taffarel, Aldair, Marcio Santos, Branco, Dunga, Raí y Mazinho.
Romario, mayor artillero en actividad del fútbol brasileño con 907 goles, según sus cuentas, sostuvo que en la actualidad no hay ningún jugador que se compare con él, ni siquiera Ronaldo.
"Como Romario, o parecido conmigo, no hay nadie. Ronaldo tiene su lugar en la historia del fútbol brasileño. Pero Ronaldo es Ronaldo, y Romario es Romario", dijo.
Romario negó que esté molesto con el técnico Alexandre Gama, que no lo ubica como titular en el Fluminense, donde no juega desde el 22 de agosto, pero reafirmó que no aceptaría quedarse en el banco de suplentes.
"Antes yo hubiera respondido rápidamente que no aceptaría ir al banco. Hoy también diría que no", respondió.
Pese a las continuas lesiones que ha tenido en los últimos tiempos, Romario reafirmó hoy su intención de jugar por lo menos un año más, aunque admitió que ya no soporta la rutina de entrenamientos y concentraciones.
"Si el fútbol fuera para mí apenas llegar al estadio dos horas antes del partido y salir al campo, jugaría hasta los 100 años. Pero desgraciadamente no es así. Hay que entrenarse mucho, viajar mucho y estar mucho en la concentración", dijo.
Romario agregó que quiere cumplir su contrato con Fluminense hasta diciembre y ayudar al equipo a clasificarse para la Copa Libertadores de 2005.
"Después, veré si sigo aquí o voy a otro equipo a jugar mi último año", afirmó.
