SANTIAGO.- El delantero chileno Marcelo Salas avizora un "complicado" partido Chile-Argentina, el próximo miércoles en Santiago, correspondiente a las eliminatorias del Mundial Alemania 2006.
"Será un partido complicado. Todos sabemos lo que es Argentina y además está el recuerdo del partido anterior, en Santiago, cuando nos pasaron por arriba (0-2)", dijo el delantero a la prensa local desde Guayaquil, donde la plantilla chilena está concentrada para jugar mañana, domingo, contra Ecuador.
Dicho partido correspondió a las eliminatorias del Mundial 2002; en el actual clasificatorio, ambos equipos empataron 2-2 en Buenos Aires, el 6 de septiembre de 2003.
"Ojalá que logremos un buen resultado con Ecuador, para llegar mucho mejor al juego del miércoles", dijo Salas, que por otra parte negó haber sido presionado por su club, el River Plate argentino, para dosificar su participación en los partidos de la selección, debido a que viene saliendo de un largo proceso de recuperación, tras sufrir una serie de lesiones musculares.
Según versiones de la prensa, el River Plate sugirió que Salas sólo juegue uno de los partidos, pues ha venido actuando sólo una vez a la semana.
"No me gusta hablar de supuestos. A mí no me ha llamado nadie, ni Astrada (Leonardo, técnico del River Plate) ni el doctor de River Plate, así es que no opino", subrayó el delantero.
"Que juegue o no los dos partidos dependerá exclusivamente de cómo me sienta. Estoy pensando en Ecuador, después veré cómo termino, pero eso no corre sólo para mí, sino para todos. Siempre hay riesgo de lesiones, pero ahora sólo pienso en el domingo", añadió.
Salas, por otra parte, aceptó el desafío del jugador argentino Javier Mascherano, compañero suyo en el River Plate, quien le anunció que el partido del miércoles "no va a ser de guante blanco".
"Si es así, mejor, será mejor el partido", respondió el jugador chileno.