LA HABANA.- El ex futbolista argentino Diego Armando Maradona "trabaja muy duro" para recuperarse de su adicción a las drogas en una clínica especializada en La Habana, donde ha recibido la visita de sus padres.
"Maradona trabaja muy duro por su recuperación" y "no puede ni hablar de salidas" de la institución médica, dijo a EFE el embajador de Argentina en Cuba, Abraham Raúl Taleb.
El Pibe cumplió el jueves su primer mes de hospitalización en el Centro de Salud Mental (CENSAM), en las afueras de la ciudad, donde recibe un tratamiento bajo el sistema de comunidad terapéuticas cerrada, que le concede muy pocas libertades.
El diplomático argentino confirmó que en estos días Maradona ha recibido la visita de sus padres, Diego y Tota, como se conoce cariñosamente a su madre, quienes llegaron el martes a La Habana.
Su estado de ánimo "es muy bueno" y Maradona "cumple estricta y disciplinadamente" el plan médico que se le aplica en la clínica habanera, dependiente del ministerio del Interior, y situada muy cerca de una de las viviendas del presidente cubano, Fidel Castro, apuntó el diplomático.
El ex futbolista trabaja mucho para bajar de peso, debido, en buena medida, a una lesión en una rodilla izquierda de la que fue operado durante su etapa en activo.
"Maradona está trabajando muy fuerte y con muy buena disciplina que abarca doce horas al día, desde las 07:45 a 19:00", recalcó el embajador.
El régimen de visitas que le está permitido "se ha reducido a su mínima expresión, o sea, el tiempo necesario e imprescindible en esta etapa de su tratamiento".
Según Taleb, el médico personal de Maradona, Alfredo Cahe, le ha expresado "su conformidad con el tratamiento que se le aplica" a su paciente.
Maradona, agregó, le dijo a Cahe que "el tratamiento es muy duro", pero que lo cumple "disciplinadamente y trabajando duro".
El crack argentino está alojado en uno de los bungalows de la clínica junto a otro donde se alberga un equipo medico especializado que le atiende.
Taleb admitió que el ex jugador del Nápoles siente nostalgia por estar alejado de sus familiares y amigos, pero "el espíritu que tiene para intentar curarse" es el mejor antídoto para atenuarla, apuntó.
El próximo día 30, fecha del 44 cumpleaños de Maradona, la dirección de la clínica le ha prometido "licencia para algún tipo de comida, pero eso sí, ni hablar de salidas", aseguró el diplomático.
Maradona, que antes de la visita de sus padres estuvo acompañado por sus hermanas Ana y Rita, podría contar con la posible presencia de sus hijas, Dalma y Giannina, en su onomástico, según Taleb.