VALENCIA.- El argentino Pablo Aimar, del Valencia, abandonó hoy el Hospital 9 de Octubre después de pasar internado la noche del sábado tras haber recibido una fuerte patada en la cara en el encuentro disputado entre su equipo y el Atlético de Madrid.
El jugador se marchó del centro acompañado por su mujer y con el labio superior hinchado por el golpe, aunque no tiene afectación alguna en los dientes, como se sospechó en un principio.
Aimar no quiso hacer declaraciones, aunque se le vio sonriente y se dejó fotografiar señalando con el dedo pulgar hacia arriba, indicando que se encontraba bien.
El suceso ocurrió en el primer minuto del partido, correspondiente a la novena jornada de la Liga española, cuando Aimar remató de cabeza un balón desde el punto de penal y el central atlético Pablo impactó involuntariamente con su bota en la cabeza del argentino al intentar despejar.
Aimar permaneció durante más de cinco minutos inmovilizado sobre el césped del campo de Mestalla y finalmente fue retirado en camilla hasta que, quince minutos después de la lesión, fue trasladado al centro hospitalario.
Aunque Aimar sufrió una pequeña fisura en la zona maxilar, se descartó la intervención quirúrgica y hoy recibió el alta. Además del traumatismo facial, el futbolista del Valencia sufrió la pérdida de consciencia y el médico del Valencia, Jordi Candel, relató que cuando inició la atención médica sobre el terreno de juego el centrocampista no podía respirar.
El jugador se someterá la próxima semana a distintas pruebas para comprobar la evolución la fisura en su mandíbula y determinar cuándo vuelve a la actividad física normal.