ATENAS.- La investigación del escándalo que protagonizaron los atletas griegos Costas Kenteris y Ekaterini Thanou antes de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, se está convirtiendo en un gigante: cada vez más grande y cada vez más lenta.
La fiscalía de Atenas aún no presentó cargos por el caso, ni siquiera contra los dos deportistas, pese a que lleva casi tres meses de investigaciones. Según publica hoy la prensa griega, el caso podría incluso dividirse en dos juicios, pero lo único que está claro es que el proceso se prolongará por varios meses más antes del comienzo del juicio.
En primer lugar, el parlamento griego debe decidir si levanta la inmunidad parlamentaria de algunos ex ministros de deportes. Los antiguos dirigentes deberían justificar las cantidades de dinero estatal que recibió el entrenador de Kenteris y Thanou, Christos Tzekos, para "crear campeones olímpicos". La policía encontró sustancias prohibidas en los registros de las oficinas de Tzekos.
Hasta que el parlamento no decida, la actividad de la fiscalía se encontrará paralizada.
Por el momento, la fiscalía ateniense sólo decidió que abrirá un proceso penal a Kenteris, Thanou y Tzekos. Los jueces deberán dilucidar si los tres fingieron un accidente de motocicleta de los dos atletas para evitar pasar un control antidoping.
En sus investigaciones, la fiscalía descubrió que dos testigos y varios médicos participaron en el montaje del supuestamente falso accidente. En caso de ser encontrados culpables, los acusados podrían enfrentarse a penas de cárcel de hasta diez años.
El escándalo "Kenteris-Thanou" sacudió los pasados Juegos sólo un día antes de su inauguración. Ambos atletas no acudieron a un control antidoping por sorpresa del Comité Olímpico Internacional (COI), amparándose en un supuesto accidente de motocicleta. Los dos terminaron retirándose de los Juegos.