SANTIAGO.- Con disturbios y un número no determinado de detenidos culminó una marcha de alrededor de 4 mil 500 simpatizantes del club Colo-Colo que se dieron cita en la Plaza Italia para iniciar una marcha de protesta por la venta del club.
La movilización se efectuó por la vereda norte de la Alameda, para dirigirse hasta el Palacio de la Moneda, con el fin de entregarle una carta al Presidente Ricardo Lagos.
La misiva tenía por objeto pedir al Mandatario que interceda para evitar la venta de la institución popular, debido a las deudas que arrastra y que ya le han significado la pérdida de verdaderas instituciones del club como el Teatro Monumental y la sede de Cienfuegos.
Los dirigentes y organizadores de la singular marcha aprobada por la Intendencia, se habían comprometido a que ésta sería una caminata pacífica.
Sin embargo, carabineros tuvo que intervenir ante hechos de violencia que se fueron produciendo en el trayecto de la marcha.
La policía uniformada utilizó sus carros lanza agua y bombas de humo para disipar a la hinchada que pedía explicaciones a los oficiales. No quedaron del todo claro los hechos que desencadenaron la reacción de Carabineros.
La marcha fue dispersada rápidamente y finalmente no pudieron cumplir con su objetivo de entregar la carta al Presidente.
Los líderes de la manifestación culpan a Carabineros de usar violencia desmedida en contra de la procesión que estaba compuesta no sólo por los hinchas de la Garra Blanca, también habían mujeres y niños que caminaron por la Alameda. Carabineros no ha dado un comunicado oficial respecto al incidente de la marcha alba.
Mientras esto pasaba en Santiago, unos mil hinchas del equipo popular se dieron cita en las calles de Puerto Montt para marchar por las calles del centro de la ciudad de la X Región exigiendo que no se sigan vendiendo los patrimonios del club. Esta manifestación terminó sin que se registraran incidentes.
