DÜSSELDORF.- El capitán de la selección argentina de fútbol, Juan Pablo Sorín, consideró que es un imperativo para el equipo obtener el pase para el Mundial de Alemania 2006.
"Tenemos la obligación de clasificarnos. No hay vuelta que darle", sostuvo uno de los bastiones del plantel que dirige José Pekerman en el "cuartel general" del equipo argentino, que se medirá mañana con Alemania en un amistoso en la ciudad de Düsseldorf.
"A veces jugando muy bien, a veces bien, a veces jugando mal y ganando, soportando todo lo que hay que soportar en las eliminatorias, con mucho viaje. Hay que ponerle el pecho y clasificarnos", subrayó el lateral ofensivo del Villarreal español.
Faltando siete fechas para la finalización de las eliminatorias de la zona sudamericana, Argentina lidera la tabla por delante de Brasil con una diferencia de dos puntos.
"Está claro que hay candidatos para la clasifación por la calidad de jugadores como Argentina y de Brasil", admitió Sorín, a la vez que advirtió que "cada eliminatoria es difícil".
En este contexto recordó el encuentro con Chile, con el que Argentina logró un agónico empate sin goles. "El partido normal de eliminatoria fue con Chile. Creo que jugó bien Chile y nosotros no encontramos la situación de toque, el volumen de juego, por eso lo sufrimos", aseguró.
"No quiero justificar la actuación de Chile, pero fue positivo que hubiera pasado, porque no es todo brillo y todo tan fácil como había sido con Uruguay. Uno aprende de todo y es positivo para el nuevo ciclo", fue su conclusión.
El capitán de la selección albiceleste, para quien "no hay mayor orgullo que vestir la camiseta argentina", sostuvo que el éxito de Argentina radica en el juego colectivo. "Tiene que ver con el espíritu de equipo, la unión, la solidaridad que se forjaron en la Copa América y en los Juegos Olímpicos", confidenció.
Sin embargo, admitió que el plantel de Pekerman está "en construcción". "Creo que toda renovación es buena, hace que todo el mundo sea más fresco, más espontáneo", reveló.
Sobre sus sentimientos respecto a la selección, Sorín confesó que llegar al Villarreal lo ayudó. "En los cambios que tuve en mi vida - que fueron muchos- el primer objetivo que tuve era estar en un club importante, no sólo para crecer en la carrera y jugar otro fútbol, sino para mantener un lugar en la selección", manifestó.
También se refirió a la situación de la liga argentina y expresó la esperanza de que en algún momento se revierta la sangría permanente de jugadores hacia el extranjero.
"Ojalá, nosotros también lo hablamos en la selección, ojalá un día sea al revés: que el fútbol argentino tenga la capacidad de traer un montón de jugadores de valía y se arme una superliga argentina", analizó.