MADRID.- En tiempos donde se habla del fin de la "era galáctica" en el Real Madrid, el triunfal Barcelona puede presumir de tener en sus filas a las estrellas más baratas y, a la postre, también las más rentables.
El club blanco vive tiempos de crisis después de afrontar la posibilidad de concluir una segunda temporada sin títulos y en estos días se comenta lo costoso que sería para la entidad iniciar una remodelación de su actual plantel, dado los contratos millonarios que maneja.
La otra cara es la del Barcelona, que se apresta a conquistar su primera Liga española desde 1999 con unos jugadores mucho más baratos que los de su tradicional rival.
Siempre que se habla de los "galácticos" del Real Madrid se alude a cinco jugadores: Ronaldo, Zinedine Zidane, Raúl, David Beckham y Luis Figo. Son los jugadores mejor pagados del fútbol español y cada uno alcanza los 12 millones de euros anuales brutos (casi 16 millones de dólares).
En total, el club blanco se gasta 60 millones de euros (80 millones de dólares) en pagar a cinco jugadores, una cantidad superior al presupuesto anual de 14 de los 20 clubes que componen la primera división española.
Por contra, el jugador más caro del Barcelona es Ronaldinho, que gana ocho millones de euros al año (10,6 millones de dólares), que es lo mismo que cobra el brasileño Roberto Carlos, el sexto jugador más caro del Real Madrid.
El siguiente jugador barcelonista que más cobra es el delantero camerunés Samuel Eto’o, el máximo goleador de la Liga con 19 tantos, quien en agosto firmó un contrato por cinco millones de euros anuales (6,6 millones de dólares).
En el ranking azulgrana le sigue el central internacional Carles Puyol, con una ficha de 4,8 millones de euros (6,4 millones de dólares) y en cuarta posición está el centrocampista Gerard, con 4,6 millones de euros (6,1 millones de dólares), un futbolista que termina contrato al final de esta temporada y al que el club no renovará.
Gerard cobra el mismo sueldo que el portugués Deco, el quinto jugador que completaría el "repóker de galácticos" azulgrana, que globalmente cobra 27 millones de euros (36 millones de dólares), menos de la mitad de lo que gana el quinteto madridista.
A pesar de esta comparación, no parece que el Real Madrid vaya a cambiar un mínimo su estrategia, invariable en los cinco años que lleva Florentino Pérez al frente del club blanco. "Nuestra línea es la misma, en el éxito y en el fracaso. El Real Madrid seguirá fichando a los mejores jugadores del mundo", dijo Pérez esta semana.
Real Madrid tiene a su favor que es un club indiscutiblemente rico y saneado, capaz de afrontar sin problemas inversiones superiores a 60 millones de euros (80 millones de dólares) al final de cada temporada. Pero el Barcelona demostró este año lo cierto del viejo axioma del fútbol: el dinero no compra títulos, aunque ayude a conseguirlos.
