TOKIO.- El gobierno de Japón exigio hoy garantías de seguridad para la selección nacional, que el 8 de junio jugará en Pyongyang ante Corea del Norte por la clasificación para el Mundial de Alemania 2006.
Tras los graves incidentes ocurridos durante el partido de clasificación entre Corea del Norte e Irán, Japón está preocupado por la seguridad de su seleccionado.
"Un premisa necesaria en partidos internacionales es que los jugadores puedan jugar con seguridad y que los espectadores sean protegidos", afirmó hoy en Tokio el secretario de Estado, Hiroyuki Hosoda.
Japón reaccionó así a los incidentes después de la victoria por 2- 0 de Irán sobre Corea del Norte, encuentro en el que jugadores y el árbitro se vieron seriamente amenazados por enardecidos espectadores en el estadio de Pyongyang.
Al termino de partido, el árbitro y sus dos asistentes esperaron más de 20 minutos antes de abandonar el terreno de juego, pues no se atrevían a pasar bajo las tribunas camino a los vestuarios. Espectadores furiosos mostraban los puños mientras volaban botellas y sillas de plástico. Los jugadores iraníes se refugiaron con miedo y rápidamente a los vestuarios.
Hosoda anunció que la Federación Japonesa discutirá los incidentes con la Federación Internacional (FIFA). "Estoy seguro de que la FIFA hará algo pues tiene las reglas correspondientes y de acuerdo a ellas ha de adoptar medidas de seguridad para la protección personal de los jugadores y de los espectadores", dijo.
El político japonés puede imaginarse incluso que el partido Corea del Norte-Japón se dispute a puerta cerrada. "La FIFA sabe también que las relaciones entre Japón y Corea son muy especiales".