NUEVA YORK.- Removido el último "obstáculo", la contratación de Larry Brown como nuevo técnico de los Knicks de Nueva York es un asunto casi consumado, ya que incluso el agente del entrenador, Joe Glass, afirmó que "en una escala del 1 al 10, es un 8".
Brown declinó confirmar si le había expresado a los Knick su deseo inequívoco de convertirse en el 22° técnico en la historia del equipo.
El presidente de los Knicks Isiah Thomas, quien sostuvo reuniones con el propietario James Dolan y el presidente del Madison Square Garden Steve Mills, también declinó comentar si Brown le dio el "sí" al equipo.
"Estamos progresando, y seguimos en conversaciones en este momento", declaró el vocero de los Knicks, Joe Favorito.
Brown cenó el lunes en la noche con Thomas y el técnico interino Herb Williams, un encuentro que Brown consideró como "positivo". Brown se había mostrado titubeante ante la posibilidad de desplazar a Williams.
"Ese era un gran obstáculo para mí, no para él", declaró Brown. "Ya dejó de serlo".
Cuando se le preguntó si le había dado una respuesta definitiva a los Knicks, Brown no quiso dar una réplica directa.
"No me hubiese reunido con el propietario y con Herb, si esto no se podía sacarse adelante", declaró Brown. "Eso es todo lo que puede decir".
La esposa de Brown, Shelly, dijo que todo marcha viento en popa. "La directiva de los Knicks está en reuniones y estamos esperando noticias de ellos. Estamos todos en sintonía", declaró dando su bendición para Brown puede hacer realidad su "sueño" de dirigir a los Knicks.
La esposa de Brown había estado preocupado por la salud de su marido, de 64 años. Brown se perdió 17 partidos la temporada pasada por una operación en la cadera, que posteriormente derivó en molestias en la vejiga.
Brown pasó por un quirófando por tercera vez en nueve meses, luego que sus Pistons de Detroit perdieron en siete juegos la serie por el campeonato de la NBA ante los Spurs de San Antonio.
El de los Knicks sería su octavo cargo como timonel en la NBA, y el fichaje se concretaría apenas una semana después que acordó rescindir su contrato con los Pistons tras dos campañas.
Se comenta que los Knicks le ofrecería a Brown un contrato de cinco años y valorado entre 50 y 60 millones de dólares.
