ROMA.- El Ebolitana-Cosenza, del grupo I de la Serie D italiana de fútbol (categoría aficionada), puede pasar a la historia como uno de los partidos más breves y conflictivos pues tan sólo duró 46 segundos y acabó con tres arrestados y siete policías heridos.
La curiosa y nefasta circunstancia se produjo este domingo en el estadio Dirceu de Eboli (Salerno), cuando nada más pitar el colegiado el comienzo del partido un seguidor visitante saltó al rectángulo de juego y dio una patada al portero adversario Spicuzza, antes de alejarse.
El meta, tras recibir el fuerte golpe, cayó sobre el terreno de juego con gestos de dolor, lo que motivó que el colegiado decretase el final del partido, cuando tan sólo habían transcurridos cuarenta y seis segundos desde el pitido inicial.
Pero, entonces, se desencadenaron los enfrentamientos en las tribunas entre ambas aficiones, que justamente ayer tenían previsto celebrar una jornada de "hermanamiento".
Los enfrentamientos motivaron la intervención policial, que se las vio y deseó para calmar los ánimos.
Al final, siete agentes del orden tuvieron que acudir a un cercano hospital para ser atendidos de heridas leves. Un teniente de los carabineros recibió tres puntos de sutura y un agente de policía sufrió la fractura de un dedo de un pie.
Durante la noche, en la comisaría se estuvieron examinando las imágenes de vídeo y fotografías que se sacaron de lo acontecido. Fueron arrestados tres aficionados locales y reconocidos otros 250, aunque este número podría ascender en las próximas horas.