PARIS.- Lille y Villarreal disputan este martes la segunda jornada de la Liga de Campeones con la intención de no quedarse descolgados en un grupo en el que, sobre el papel, son los dos pequeños.
Por presupuesto y por palmarés, franceses y españoles están por debajo del todopoderoso Manchester United y del Benfica, aunque la primera jornada puso de manifiesto que la teoría no siempre se cumple sobre el terreno de juego.
Los levantinos plantaron cara a los ingleses, mientras que los galos cayeron en el ocaso de un partido en el que ya saboreaban un punto.
El ambiente en ambos equipos es el de un partido que se puede ganar y, además, que la victoria es imprescindible para no descolgarse de los mejores.
Villarreal llega a París en un ambiente de moral recobrada tras la victoria cosechada en el campo del Espanyol de Barcelona el pasado sábado (1-2), la primera de un equipo que en el inicio de temporada no se parece nada al del final de la pasada.
El juego desplegado en el Olímpico de Montjuic no invita a pensar que las dudas están superadas, pero el equipo pareció recuperar alguno de los instintos del año pasado.
Europa no es España y lejos de su estadio los levantinos parecen bendecidos en la competición continental, donde llevan 13 meses sin conocer la derrota.
El técnico chileno Manuel Pellegrini no podrá contar con Javi Venta, que resentido de un problema muscular no viajó a París, pero recuperó al lateral holandés Jan Kromkamp, ausente en Barcelona por un proceso gripal pero que parece recuperado.
El canterano César Arzo fue llamado de urgencia para sustituir a Venta. El entrenador chileno tampoco podrá contar con José Mari, que cumplirá el último de los cuatro partidos europeos de sanción que arrastraba de la pasada temporada, por lo que Pelegrini mantiene la duda de quien acompañará a Diego Forlán en la punta del ataque. Al puesto postulan el argentino Luciano Figueroa, que parece la primera opción, y el canario Antonio Guayre.
Lille afronta el partido con la duda de saber cómo se comportarán sus jugadores en el estadio de Francia, un exilio de lujo al que han sido abocados por las malas condiciones de su estadio.
El conjunto del norte de Francia tampoco ha comenzado la temporada con el buen juego que en la pasada le aupó al subcampeonato, pero la victoria lograda el sábado contra el Saint-Etienne (2-0) también ha tranquilizado los ánimos de los galos.
Emisarios del Lille han espiado al Villarreal en cuatro ocasiones y el conjunto galo ha insistido en los últimos entrenamientos en las jugadas a balón parado, con las que pretenden desestabilizar al rival.
La derrota cosechada en Lisboa en la primera jornada les obliga a vencer en su estadio si quieren conservar opciones de clasificación.
Por ello, el entrenador, Claude Puel, que dispone de todo su efectivo, podría alinear juntos por primera vez en ataque al nigeriano Peter Odemwingie y al francés Matt Moussilou.
Lille: Sylva; Lichtsteiner, Tavlaridis, Schmitz, Tafforeau; Acimovic, Makoun, Bodmer, Dernis (Debuchy); Moussilou y Odemwingie.
Villarreal: Viera; Kromkamp, Gonzalo Rodríguez (Peña), Quique Alvarez, Arruabarrena; Senna, Josico, Riquelme, Sorín; Figueroa y Forlán.
Arbitro: Peter Froejdfeldt (SUE).
Lugar: Estadio de Francia (Saint-Denis)
Hora: 20.45 horas (14.45 en Chile).
