RÍO DE JANEIRO.- El club Alianza Lima peruano pretende demandar al árbitro brasileño acusado de recibir sobornos de una mafia de apuestas, y que confesó haber favorecido al Banfield argentino en un partido entre ambos equipos por la Copa Libertadores de América.
En una entrevista publicada hoy por el diario Folha de Sao Paulo, el presidente del Alianza Lima, Alfonso de Souza Ferreira, afirmó que pedirá copias de las investigaciones sobre las irregularidades cometidas por el árbitro brasileño Edilson Pereira de Carvalho para buscar compensaciones.
"Vamos a solicitar que nos envíen copia del interrogatorio al que fue sometido el árbitro (en el que admite que recibió sobornos para favorecer el Banfield) para tenerlo como prueba. Comprobado que él actuó contra la ley, reclamaremos nuestros derechos y le cobraremos al árbitro por los perjuicios", afirmó.
"Los resultados de la Libertadores, creo, ya no pueden ser revertidos. La Libertadores acabó. Pero queremos acudir a los medios legales", agregó el dirigente deportivo.
De Souza Ferreira, aclaró que, además de demandar al árbitro para que repare los perjuicios sufridos, el Alianza Lima estudia la posibilidad pedir una compensación ante la Confederación Suramericana de Fútbol (Conmebol).
"Vamos a consultar nuestro departamento jurídico para ver si podemos pedir una compensación financiera a la Conmebol. Es probable que sí, pero, de cualquier forma, cobraremos del árbitro a título personal", afirmó.
El árbitro brasileño, preso desde el sábado y protagonista de un escándalo por la manipulación de resultados a cambio de sobornos de una mafia de apuestas, admitió ante la policía que, además de ocho partidos por el Campeonato Brasileño, recibió dinero para favorecer al Banfield en un partido por la Libertadores.
El compromiso por el Grupo 6 de la Libertadores de este año fue vencido 3-2 por el Banfield y fue determinante en la eliminación del Alianza Lima.
En su entrevista a Folha de Sao Paulo, el dirigente del Alianza Lima recordó algunas decisiones arbitrales polémicas en el partido vencido por el Banfield, entre ellas cuando Pereira de Carvalho validó el primer gol de los argentinos pese a que no había autorizado el cobro de una falta.
Pereira de Carvalho, miembro de la lista de jueces de la Federación Internacional de Asociaciones de Fútbol (FIFA), decidió colaborar con la justicia para beneficiarse con una posible reducción de la pena.
El árbitro aseguró que la mafia de apuestas de la que recibía sobornos intentó corromper a otros árbitros, aunque admitió que no sabe si también aceptaron o no.
El escándalo de corrupción en el fútbol brasileño surgió el sábado, cuando la policía arrestó a Pereira de Carvalho en desarrollo de una investigación del Ministerio Público y de la Policía Federal, sobre una mafia que hacía apuestas ilegales por internet con los resultados de los partidos de fútbol.
La investigación mostró que el árbitro recibía entre 10.000 y 15.000 reales (entre 4.350 y 6.520 dólares) por cada partido en cuyo resultado influía mediante la marcación de penales inexistentes, expulsiones injustas de jugadores, anulación de goles legítimos y otras acciones.
