 Michel Zen-Ruffinen cerrará el Congreso "Play the Game" en Copenhague. |
COPENHAGUE.- La FIFA recibió un pedido para que responda qué acción adoptó cuando un periodista de Burma fue condenado a muerte, luego que publicara artículos en los que preguntó dónde estaba el dinero que la máxima entidad del fútbol mundial entregó a la Federación de ese país.
La pregunta fue enviada a la FIFA por especialistas de cincuenta países que participan del Congreso "Play the Game", en Copenhague, luego de que se conoció públicamente el caso del periodista Zaw Thet Htwe.
El reportero finalmente se salvó de la pena de muerte que le aplicaron en Burma, gracias a presiones internacionales, especialmente de Amnistía Internacional.
"Amnistía Internacional intervino por él y le salvo la vida, no la FIFA a la que hemos invitado aquí siempre, pero nunca ha querido venir", se lamentó Jens Sejer Andersen, director de "Play the Game" al inaugurar el Congreso, el domingo pasado, cuando reveló el caso del periodista de Burma (ex Birmania).
Zaw Thet Htwe fue invitado a asistir a "Play the Game", pero no puede abandonar su país.
Los participantes del Congreso resolvieron enviar una nota a la FIFA preguntándole qué acción adoptó cuando el periodista fue detenido y condenado a muerte y si, además, inició una investigación para saber qué ocurrió con el dinero que la FIFA entregó a la Federacion de Burma a partir de 1998.
"Play the Game", que celebra su cuarta edición y debate sobre la problemática del deporte moderno, comenzó el domingo con una conmovedora exposición de la ex campeona mundial de atletismo Kelly White sobre su consumo de doping.
Las deliberaciones y exposiciones continuaron el lunes con fuertes denuncias del ex presidente de la Federación Argentina de Vóleibol (FAV), Mario Goijman, y concluirá el jueves con más debates sobre corrupción en el deporte, que incluyen a la FIFA.
Los especialistas pidieron a la FIFA que envíe su respuesta antes de que concluya el Congreso, que será cerrado el jueves con una exposicion sobre trasparencia en el deporte a cargo de Michel Zen-Ruffinen, ex secretario general de la FIFA y que en 2002 fue despedido del organismo tras formular graves acusaciones de corrupción contra su presidente, Joseph Blatter.