Adriano (derecha) convence a Zoro de que siga jugando, cuando éste se retiraba enojado con la pelota en las manos. |
ROMA.- La policía italiana identificó a cuatro de los hinchas del Inter de Milán que el pasado 27 de noviembre insultaron con cánticos racistas al jugador del Messina Mark Zoro y les impuso hoy un sanción de cinco años sin poder entrar a un estadio de fútbol.
Es la primera vez en el Calcio que se aplican sanciones a espectadores por insultos racistas, ya que por el momento sólo se aplicaron multas a los clubes.
Los cuatro hinchas fueron identificados a través del análisis de las cámaras instaladas en el estadio, y sobre todo gracias a la nueva ley de seguridad en los estadios que prevé tickets nominales y obliga al espectador a sentarse en un puesto determinado.
La sanción a estos cuatro hinchas del Inter les prohibirá acceder a cualquier estadio, también en el extranjero, y les obligará a firmar en comisaría durante los encuentros del campeonato y de Liga de Campeones.
Aunque cada fin de semana se registran numerosos cánticos racistas dirigidos a los jugadores de color, esta vez el hecho cobró gran trascendencia porque el jugador marfileño del Messina detuvo el partido y amenazó con abandonar el campo.
El jugador africano Zoro, desde hace cuatro años en el Messina, tomó el balón entre sus manos y se dirigió al cuarto árbitro para señalarle los insultos racistas que contra él proferían los seguidores del Inter y anunciarle que abandonaba el encuentro.
Sólo la mediación de dos jugadores del Inter, el nigeriano Obafemi Martins y el brasileño Adriano consiguieron calmar a Zoro.