ROMA.- Paolo Di Canio, el polémico jugador de la Lazio, dijo que por el momento evitará "gestos que para algunos son del demonio", en alusión a sus polémicos ademanes fascistas, que le valieron duras críticas y sanciones.
El jugador fue penalizado con una fecha de suspensión en la liga italiana, luego de que el presidente de la FIFA, Joseph Blatter, criticara con dureza sus actitudes en el campo de juego.
La Federación Italiana de Fútbol (FIGC) le aplicó una fecha de pena, luego de las controversias que desató, más que nada un castigo simbólico, para muchos exageradamente moderado.
"Por el momento, voy a evitar gestos que para algunos son del demonio, por el bien del club y por la numerosa gente que me ha respaldado", afirmó Di Canio en una entrevista con una emisora de radio romana.
Las declaraciones del futbolistas fueron interpretadas por la prensa italiana como una estrategia, pues su contrato con la Lazio finaliza en junio de este año y llegó el momento de iniciar conversaciones para la renovación.
"No está en mis planes irme de Lazio", aclaró en la entrevista, reforzando esas especulaciones.
Di Canio efectuó el gesto con el brazo en alto que popularizó el dictador Benito Mussolini, durante un par de partidos de la liga italiana, pero recalcó que se trató de "un tradicional saludo romano".
"Habría que eliminar buena parte de las esculturas de Roma que tienen ese gesto", se defendió el jugador, quien también pidió sanciones para los que reinvindican con íconos y emblemas la figura del Che Guevara.
