VALENCIA.- Un error del portero Valdés, aprovechado por Villa, dio la victoria al Valencia por 1-0 ante el líder Barcelona, lo que comprime la Liga, ya que la ventaja del conjunto catalán quedó reducida a seis puntos de los de Mestalla, que mantienen la segunda posición de la tabla.
En el encuentro de las ausencias (Ronaldinho, Deco, Messi, Ayala, Vicente, Marchena), el Barcelona llevó la iniciativa durante muchos minutos, pero el Valencia aprovechó su contragolpe y el error de Valdés para conseguir los tres puntos.
La primera mitad estuvo a la altura de un encuentro entre dos de los equipos punteros de la Liga española, en la que el Barcelona llevó más la iniciativa en el juego, pero el Valencia fue superior a la hora de crear ocasiones de gol.
El Barcelona, muy sólido en el centro del campo con Van Bommel y Edmilson, manejó el balón en esa sector sin prisas y sin pausas, al ritmo que más le convenía, ante un Valencia que cedió terreno con la intención de sorprender al líder al contragolpe.
Fue así como el equipo de Quique Sánchez Flores encontró sus opciones para batir a Víctor Valdés. La primera por medio de Angulo, a continuación en una acción de Regueiro y más tarde en una genialidad de Aimar.
Fue necesario esperar al minuto 38 para que el Barcelona hiciera su primera ocasión de gol en un magnífico cabezazo de Márquez a la salida de un córner, que Cañizares despejó con acierto.
Cuando el encuentro llegaba al descanso, un fallo garrafal de Víctor Valdés, que cedió el balón a Villa, propició el 1-0. Villa no había tenido todavía ninguna ocasión para marcar. En la primera y más ingenua demostró que está en un excelente momento.
En la reanudación, Eto,o jugó en la delantera y el Barcelona incrementó su dominio territorial en un partido cada vez más físico, con menos fútbol que en el primer tiempo y, sobre todo, muy intenso.
El Barcelona no encontraba la forma de llegar con peligro ante Cañizares. Lo hizo, sin embargo, con claridad en el minuto 67, pero Cañizares, otra vez soberbio, evitó el gol de Larsson.
El partido entró en el último cuarto de hora con el guión completamente definido. Con el Barcelona volcado sobre la meta de Cañizares en pos del empate y Valencia replegado en su área, consciente de que un segundo gol sería definitivo.