ASUNCIÓN.- El Cerro Porteño de Paraguay y el Palmeiras de Brasil empataron 0-0 el partido que por el Grupo 7 de la Copa Libertadores de América disputaron en el estadio La Olla Azulgrana de Asunción.
El campeón paraguayo fue el que dominó las acciones desde el primer momento y a los 40 segundos se vio la primera situación muy clara para Cerro Porteño, cuando Walter Fretes inició una corrida por la derecha y lanzó el centro que un defensor brasileño, por milímetros pudo adelantarse al delantero cerrista Achucarro.
En los quince minutos siguientes, Cerro Porteño desperdició al menos cuatro jugadas claras de gol. Los paraguayos jugaban cruzando la pelota de izquierda a derecha, y con una rotación permanente dejaban sin posibilidad al Palmeiras de armarse como para tener un respiro.
Fueron 15 minutos de furia de Cerro Porteño y en los que el Palmeiras no encontró el camino para frenar el ímpetu de los paraguayos.
Sin embargo, los cerristas no pudieron concretar goles y tuvieron que bajar el dinámico ritmo que habían impuesto. El Palmeiras aprovechó para armar sus líneas y comenzar a jugar el partido.
Desde los 20 minutos las acciones se emparejaron. El juego dejó de ser un monólogo cuando Marchiño comenzó a moverse por todo el frente del ataque. Pese a no haber encontrado a sus compañeros, las acciones se hicieron más compartidas.
No obstante, Cerro Porteño siguió siendo el claro dominador, el que mejor actitud tuvo para llegar al arco del rival y el que manejó el trámite del partido pero no pudo plasmar su mejor juego en goles. El empate 0-0 del primer tiempo fue buen negocio fue para el Palmeiras.
En la segunda etapa, también fue Cerro Porteño el que desde el inicio se acercó peligrosamente al gol. A los 47 minutos Edgar González aprovechó un centro del argentino Mario Grana y de cabeza envió la pelota al travesaño.
Sin embargo, el ingreso de Ricardinho, que se acopló al juego del "comandante" Marcinho, le dio mayor movilidad al Palmeiras que, además, salió a marcar desde más arriba sin dejar mucho resquicio a los cerristas.
Paulatinamente los brasileños fueron tomando la manija del encuentro y a los 65 y 67 minutos, Edmundo le perdonó la vida a Cerro Porteño en las jugadas más claras de gol de la segunda parte del encuentro.
Marcinho se hacía inatajable para los paraguayos que apelaron a sucesivas faltas para frenarlo y Leonardo que pese a ser defensa en su equipo, pesaba más en el área del rival con sus peligrosos golpes de cabeza.
El Palmeiras elevó su nivel de juego mientras que los cerristas se quedaron y no pudieron reprisar la dinámica de la primera etapa.
Sin ser un partido excelente, el encuentro fue abierto y agradable y el Palmeiras cerró el negocio con un empate que le conviene como visitante.
El partido se jugó en Asunción, en el estadio del Cerro Porteño, La Olla Azulgrana, ante unos 10 mil espectadores. El árbitro fue el uruguayo Vázquez que tuvo como colaboradores a sus compatriotas Pablo Fandiño y Walter Rial.
