SANTIAGO.- El Guaraní paraguayo es un equipo que necesita cirugía y para ello los dirigentes locales contrataron al técnico chileno Roberto Rojas, ligado durante su carrera como entrenador exclusivamente al Sao Paulo de Brasil.
Rojas asumió sus funciones ayer y el fin de semana observó el partido que sus nuevos dirigidos sostuvieron con 3 de Febrero. Y sabe que la tarea no es fácil, que debe comenzar por terminar con la crisis futbolística por la que atraviesa el equipo de Dos Bocas, que lo tiene en la penúltima posición de la tabla de posiciones producto de un triunfo en siete encuentros.
Tras la práctica, Rojas señaló al diario Ultima Hora que "uno siempre confía en los procesos, pero en el fútbol es relativo eso. Lo que prometo es trabajar y hacer todo lo posible para buscar la manera de sacar al club de la difícil situación en que actualmente se encuentra. El club cuenta con un plantel muy joven y lo primero que vamos a realizar es una conversación sincera con ellos. Esta semana vamos a dialogar mucho. En todas partes del mundo hay problemas, pero los mismos tienen su solución con los trabajos".
Rojas anunció que su ayudante más cercano será el brasileño Toninho y que en su equipo también estarán Pedro Sandoval, quien dirigió el equipo el fin de semana pasado, y el preparador físico Wanilton Zambroti.
El debut oficial del técnico chileno en la banca de Guaraní será el viernes, cuando enfrente los aurinegros enfrenten a Nacional.
